Durante su visita oficial a China, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, captó la atención al proponer un ambicioso proyecto de conexión interoceánica para conectar a América Latina con Asia, específicamente con China, como parte de una visión para posicionar a la región como un eje clave del comercio global.
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Las declaraciones se dieron en el marco de la formalización de la adhesión de Colombia a la Ruta de la Seda. Petro, quien asiste como presidente pro tempore de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), subrayó la importancia de esta integración para el desarrollo económico y tecnológico de la región.
El mandatario detalló que el proyecto buscaría conectar los océanos Atlántico y Pacífico a través de una red ferroviaria, con Colombia como un punto estratégico debido a su ubicación geográfica.
Según Petro, esta infraestructura no solo facilitaría el comercio con China, sino que también integraría países vecinos como Venezuela, Panamá y Ecuador mediante avances tecnológicos, como cables de fibra óptica submarinos, para conectar con Asia y Europa.
“La energía limpia cruzaría los mares, enriqueciéndonos a todos, porque la vida enriquece. Las redes férreas de América Latina podrían ser la base para una conexión interoceánica múltiple”, afirmó.
Y agregó: “Juntar a América Latina con China, por un lado, y a América Latina con Europa y África, por el otro, puede generar, horizontalmente y no solo verticalmente, el flujo del conocimiento y construir un gran cerebro planetario”.
La idea de un tren interoceánico no es nueva. Petro ya había propuesto en 2024 un ferrocarril en Chocó para competir con el Canal de Panamá, un proyecto que abrió el debate por su viabilidad.
Además, planteó la posibilidad de construir un tren entre Buenaventura y Barranquilla. Sin embargo, su propio ministro de Transporte tuvo que explicar que se trataba de un proyecto inviable por costos.
¿Qué es la Ruta de la Seda?
Es un proyecto global liderado por China para financiar infraestructura y fomentar la conectividad comercial en más de 150 países. Lanzada en 2013, incluye carreteras, puertos, ferrocarriles y telecomunicaciones.
En América Latina, 21 de 33 países ya forman parte de esta iniciativa, que busca establecer nuevas rutas comerciales y fortalecer la interdependencia económica con China.
El anuncio de Petro se produce en un contexto de tensiones con Estados Unidos, tras un reciente enfrentamiento diplomático con el presidente Donald Trump, lo que ha acelerado el acercamiento de Colombia a China.
China, como potencia económica global, cuenta con los recursos para desarrollar proyectos que podrían modernizar puertos, carreteras, ferrocarriles y redes digitales en el país. Esto no solo mejoraría la competitividad regional de Colombia, sino que también facilitaría la integración con mercados internacionales, especialmente en Asia, Europa y África.
En Beijing, Petro también participó en el IV Foro Ministerial China-Celac, donde abogó por una mayor integración regional con Europa y Estados Unidos para equilibrar las relaciones globales.
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