La reforma a la salud del Gobierno de Gustavo Petro entró en cuidados intensivos. El Partido Liberal retiró el apoyo, los conservadores y la U suspendieron los diálogos con la Casa de Nariño. Sin los votos para sortear los debates en el Congreso, la reforma parece tener sus últimos suspiros. Alejandro Gaviria, exministro de Petro, aseguró que nunca existió la disposición para encontrar acuerdos.

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“Desde el Ministerio de Salud nunca ha existido la disposición de buscar acuerdos razonables. Primero fue la cerrazón, una reforma construida a puerta cerrada. Después el simulacro de un diálogo constructivo. Por último, los retoques cosméticos a un articulado que nunca cambió”, detalló Alejandro Gaviria en su cuenta de Twitter.

Efraín Cepeda (Conservador) y Dilian Francisca Toro (La U) señalaron este miércoles que se alejarán de los diálogos con la ministra Carolina Corcho porque no han sentido que sus inquietudes y propuestas hayan sido escuchadas.

“No asistiremos a una reunión más del proyecto de ley de reforma a la salud porque consideramos que es una pérdida de tiempo”, enfatizó Cepeda.

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De este modo, el presidente Petro parece que sacrificó su capital político para defender a su ministra. Sin el respaldo de los liberales, la U y los conservadores, la reforma no tiene garantías de buen trámite en el Legislativo.

Alejandro Gaviria ha sido insistente en manifestar sus desacuerdos con la reforma a la salud del gobierno. Incluso, su salida del ministerio de Educación habría estado motivada por sus desencuentros técnicos con la ministra Carolina Corcho.

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“Los consensos han sido aparentes. Construidos sobre principios generales que no abordan la operación del sistema. Son consensos falsos basados en la ambigüedad y algunos propósitos grandilocuentes. Dudo de la posibilidad de llegar a acuerdos razonables”, había sido otra de las críticas de Gaviria.