Bancamía, entidad de la Fundación Microfinanzas BBVA, fue galardonada con el Premio Florángela Gómez de Asobancaria en la categoría de Transformación Digital por su ecosistema digital enfocado en la inclusión financiera de los sectores más vulnerables.
En 2024, la entidad consolidó una arquitectura digital integral compuesta por más de 25 herramientas que permiten a los microempresarios acceder a servicios como pagos, ahorros y créditos productivos, incluso en zonas apartadas.
(Vea también: Davivienda, Bancolombia y más bancos cambiarán el envío de plata: ya hay fecha crucial).
Actualmente, el 32 % de sus clientes y el 26 % de las transacciones son digitales, y el 13 % de los créditos se tramitan por canales digitales o híbridos. El ecosistema también incluye una estrategia de educación financiera y alfabetización digital con contenidos especializados, acompañamiento y medición de impacto.
La presidenta ejecutiva, Viviana Araque Mendoza, destacó que la transformación digital en Bancamía va más allá de la tecnología, buscando cerrar brechas de desigualdad e inclusión.
Los usuarios tienen acceso a productos innovadores como Rentaplus, canales como WhatsApp y herramientas como Visita Virtual y pagos con código QR.
Con más de 528.000 clientes digitales, el banco continúa fortaleciendo su sostenibilidad operativa y tecnológica, promoviendo una experiencia de valor y expandiendo el acceso al sistema financiero para quienes más lo necesitan.
Cuántos años tiene Bancamía
La historia de Bancamía en Colombia comienza en 2008, cuando se creó el primer banco de microfinanzas del país, fruto de la fusión de la Fundación Microfinanzas BBVA con la Corporación Mundial de la Mujer Colombia y Medellín.
Su nacimiento fue anunciado por la presidenta María Mercedes Gómez de Bahamón, con presencia del entonces presidente colombiano Álvaro Uribe el 14 de octubre, arrancando operaciones con 170.000 microempresarios, 195.000 créditos vigentes y una red que cubría más de 212 municipios desde 70 oficinas.
En sus primeros años, Bancamía creció de forma notable: al cumplir nueve años en 2017, ya contaba con 1,3 millones de clientes, había desembolsado 7,6 billones de pesos en créditos y operaba en el 91 % de los departamentos del país, con 200 oficinas. La banca relacional, con asesoría personalizada, fue la piedra angular del modelo, lo que permitió reducir la brecha digital y generar confianza con clientes en zonas apartadas gracias a 1.300 asesores equipados con tabletas.
Por qué es bueno que se creen más bancos en Colombia
La creación de más bancos en Colombia representa una oportunidad significativa para mejorar el acceso al sistema financiero, especialmente en un país donde todavía existe una alta proporción de población no bancarizada. A pesar de los avances de entidades como Bancamía en la inclusión financiera de sectores vulnerables, muchas personas en zonas rurales y urbanas marginales siguen sin acceso a productos como cuentas de ahorro, créditos productivos o seguros.
Nuevas entidades bancarias pueden cubrir esos vacíos geográficos y demográficos, generando competencia en servicios, reduciendo costos y ampliando la cobertura a poblaciones históricamente excluidas del sistema financiero tradicional.
Además, la entrada de nuevos bancos, especialmente aquellos con modelos digitales o alternativos, promueve la innovación tecnológica y la diversificación de productos. En un entorno financiero más competitivo, las entidades se ven obligadas a mejorar su eficiencia, invertir en infraestructura digital, y ofrecer productos más accesibles, rápidos y personalizados.
Esto beneficia directamente al consumidor, quien tendrá más opciones para elegir y podrá encontrar servicios ajustados a sus necesidades, como microcréditos, cuentas sin costo o seguros asequibles. También se generan incentivos para fortalecer la educación financiera, lo que contribuye al uso responsable de los servicios financieros y al empoderamiento económico de la población.
Por último, más bancos pueden fortalecer la economía nacional al canalizar el ahorro hacia la inversión productiva. Al facilitar el acceso al crédito, especialmente a pequeñas y medianas empresas, se impulsa la generación de empleo, el crecimiento del emprendimiento y la movilidad social.
La banca no solo presta dinero, sino que también moviliza recursos para el desarrollo. En un país como Colombia, con una economía en transformación y desafíos en equidad e inclusión, fomentar la creación de bancos responsables, transparentes e inclusivos es un paso clave para construir una sociedad más justa y próspera.
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