El Inpec está viviendo días complicados luego de los múltiples escándalos dentro de la institución. Uno de los más reconocidos fue el de la fuga de alias ‘Matamba’ de la cárcel La Picota en Bogotá, quién se voló vestido con los logotipos de la entidad y salió por la puerta del penal como cualquier visitante.

Además, la entidad carcelaria también vive serias investigaciones por el caso del empresario Carlos Mattos, que si bien no protagonizó una fuga, fue descubierto paseándose por las calles de Bogotá con la complicidad de guardias del Inpec que lo transportaban en camionetas de propiedad de la institución.

A raíz de estos escándalos surgió la propuesta de reformar el Instituto Penitenciario y Carcelario. Al respecto, el director de la entidad, el general Tito Yesid Castellanos, hizo un balance de un plan de inspección que se hizo en varios penales alrededor del país y la sorpresa fue mayor cuando entregó los resultados.

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El funcionario informó una aterradora cifra: durante lo corrido del 2022 se han fugado 363 reclusos que estaban cobijados con el beneficio de detención domiciliaria. Según los datos oficiales, 74 mil reclusos tienen esta medida en todo el país.

“Los hombres y mujeres del Inpec estamos buscando un fortalecimiento en la transformación integral de Instituto para beneficio de todos los colombianos. Son 363 que no hemos encontrado y hemos solicitado la revocatoria de la medida de aseguramiento ante los jueces de control de garantías o que lleven el proceso”, resaltó el general.

El oficial detalló que estas personas evaden la detención saliendo sin permiso o eludiendo las restricciones de movilidad que se les impone por parte de los jueces de control de garantías. Aunque no explicó cuánto dura el proceso, Castellanos confía en que vuelvan a tener las medidas de aseguramiento pronto para recapturar a los fugados.

“Vamos a verificar, una vez tengamos la medida, irlos a buscar. Probablemente aparezcan”, finalizó.