El reporte es del periodo comprendido entre el 28 de abril y el 23 de mayo, en el que se han registrado 775 actividades en el marco de paro nacional, en la capital.

Según los datos del Distrito, en ellas han participado 240.000 participantes y se distribuyeron en:

  • 238 marchas
  • 78 bloqueos
  • 459 concentraciones o plantones.

En algunas de esas actividades se registraron “graves violaciones y afectaciones a los derechos humanos tanto por parte de algunos violentos manifestantes, como de la Fuerza Pública”, indicó el informe que la alcaldesa, Claudia López, le entregó a la representante en Colombia de la Alta Comisionada para los Derechos Humanos de la ONU, Juliette de Riveros.

Allí se documentó que hay un total de 380 policías heridos, 17 de ellos muy graves; así como 361 civiles heridos, de los cuales cinco se encuentran en delicado estado de salud.

Excesos y abusos por parte de la Policía

La alcaldesa reconoció públicamente los esfuerzos de la Policía pero también resaltó algunos hechos que deben ser investigados:

“Puedo dar fe que algunos miembros del Esmad han abusado de la fuerza, detenido arbitrariamente a jóvenes, no los han trasladado a URI, sino a estaciones de Policía, o no han seguido los protocolos que la ley prevé”.

En particular se refirió al aterrizaje de un helicóptero para hacer reabastecimiento logístico y de munición, en el Portal Américas y en el Colegio Claretiano de Bosa. “Eso viola abiertamente los protocolos de DD.HH y, en buena medida, esa abierta violación a los protocolos ha exacerbado las tensiones”, añadió.

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López también dijo que en Bosa, en el Portal Américas, el Portal de la calle 80, cerca al Portal de Suba, y en la Plaza de Bolívar se ha registrado el 72 % de las denuncias por estos excesos y abusos.

Y ejemplificó algunos de ellos:

  • 33 jóvenes han sufrido lesiones faciales o oculares.
  • En el Portal Américas se detuvo arbitrariamente a un joven que
    estaba grabando lo que ocurría desde un puente peatonal.
  • Se tiene registro de 600 acciones de abuso de la fuerza contra
    algún ciudadano (golpiza, retención u hostigamiento).
  • Se encuentran bajo investigación dos muertes: la de Dylan Barbosa, quien habría chocado su moto contra una tanqueta del Esmad; y la de Daniel Alejandro Zapata, quien fue golpeado con un objeto contundente y sufrió un trauma cráneo encefálico severo.

Este fragmento del informe, la alcaldesa lo concluyó señalando que en las 161 intervenciones del Esmad durante las manifestaciones se ha
establecido “día por día y localidad por localidad, cómo se hicieron y quien dirigía los operativos. Todo está documentado”, y agregó: “Puedo afirmar con toda certeza que no ha habido una sola intervención que no haya tenido una causal justificada en la ley”.

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“Intentos de homicidio contra policías”

La Alcaldía reportó agresores y vándalos que han infiltrado las manifestaciones pacíficas y que han dejado lesionados a 380 uniformados.

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Así lo detalló la mandataria de los bogotanos:

“Aquí ha habido 15 intentos de homicidio de policías, 14 de ellos fueron víctimas en el CAI de La Aurora. Se entraron (los uniformados) al CAI para no tener ningún tipo de confrontación, y unos ciudadanos lo apedrearon, lo rompen pese a que es blindado, les tiraron bombas incendiarias a los policías, y los vieron quemarse, los grabaron y lo celebraron, y no les dieron ninguna opción de salida”.

Además, se refirió al ataque contra Christian Calderón, un patrullero de 22 años al que “le lanzaron una bomba molotov a su rostro” y se encuentra recluido en el Hospital Simón Bolívar porque; así narró su situación:

“Es un muchacho humilde como muchos de los mismos manifestantes, solo que es miembro del Esmad. No estaba cometiendo ningún acto arbitrario. Él está hoy en cuidado intensivos, por cumplir su labor en medio de una aglomeración, se contagió de COVID-19, ahora tiene la cara destrozada, y una profunda afectación física y emocional”.

Por último, Claudia López reseñó algunos ataques contra la infraestructura de la ciudad:

  • 14 CAI incendiados.
  • 26 CAI fueron vandalizados
  • Se estima que hubo 6.657 daños a la infraestructura de la ciudad.
  • Las pérdidas podrían alcanzar los 28.500 millones de pesos.

Por su parte, la representante de las Naciones Unidas, Juliette de Riveros, indicó que le están haciendo seguimiento a casos de presuntos casos de violencia sexual, retenciones, ataques a periodistas, y otro tipo de situaciones que se han registrado en el país; así como al uso de armas letales por parte de particulares para atacar la protesta.

“La violencia y el uso excesivo de la fuerza, genera pérdidas, dolor, muerte, confusión y también desesperanza, y vulnera los Derechos Humanos”, sostuvo.