Antes de ser elegido como el nuevo sumo pontífice de la Iglesia católica, el papa León XIV llevaba una vida marcada por la cercanía con la gente, la humildad y el servicio. Uno de los momentos que mejor refleja su estilo de vida ocurrió en 2018, cuando aún era obispo de Chiclayo, en Perú, y celebró su cumpleaños número 63 rodeado de fieles, misioneros y miembros del personal eclesiástico en la Catedral de Santa María, sede principal de esa diócesis.
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Aquel día, como era costumbre en la comunidad chiclayana, el obispo recibió varios gestos de cariño. Con un espíritu sencillo y sonriente, aceptó regalos como una camisa y algunos detalles que le fueron entregados por los asistentes. No hubo lujos ni grandes celebraciones, solo un ambiente fraterno y de fe. Las imágenes que recuerdan ese cumpleaños fueron compartidas por la propia Diócesis de Chiclayo y hoy, tras su elección como León XIV, han vuelto a circular en redes sociales y medios católicos como símbolo de su estilo pastoral cercano y humilde.
Así le celebraban los cumpleaños al papa León XIV en Perú
Durante la celebración, se le vio contento, compartiendo con los presentes, saludando a quienes se acercaban y hasta partiendo una torta de cumpleaños que le ofrecieron como homenaje. La alegría del momento era evidente y contrastaba con la sencillez del entorno: una iglesia llena de fe, sonrisas sinceras y un obispo que no buscaba protagonismo, sino compartir en comunidad.
Este tipo de gestos y recuerdos son los que hoy permiten comprender por qué su elección como papa ha sido recibida con tanto entusiasmo por católicos de todo el mundo.
León XIV representa a una Iglesia más humana, cercana al pueblo, especialmente a los más humildes. Su paso por Perú dejó huella, no solo en lo pastoral, sino también en lo humano. Su disposición al servicio, su entrega misionera y su conexión con la cultura local hicieron de él una figura muy querida.
Aquella celebración de 2018 no fue un evento aislado. A lo largo de sus años como obispo de Chiclayo, fue común verlo participando en fiestas patronales, reuniones con jóvenes, encuentros con comunidades rurales e incluso visitando zonas alejadas para compartir la fe y escuchar las necesidades de los fieles. Su vocación misionera, heredada de su formación agustina, marcó profundamente su paso por Perú.
Hoy, como sucesor de Pedro, el papa León XIV carga sobre sus hombros la enorme responsabilidad de guiar a más de mil millones de católicos en todo el mundo. Sin embargo, quienes lo conocieron de cerca en Chiclayo saben que, pese a la magnitud de su nuevo rol, seguirá siendo el mismo pastor sencillo que partía una torta con su comunidad en la catedral local.
¿Quién es el nuevo papa León XIV?
El papa León XIV nació en Chicago, Estados Unidos, en 1955. Ingresó a la Orden de San Agustín en 1977 y fue ordenado sacerdote en 1982.
Su vida pastoral estuvo profundamente vinculada a América Latina, especialmente a Perú, donde trabajó en misiones, formación de religiosos y dirigió la diócesis de Chiclayo desde 2015.
En 2023, fue nombrado cardenal y prefecto del Dicasterio para los Obispos. Su elección como papa rompe con la tradicional reticencia hacia pontífices estadounidenses, gracias a su cercanía con América Latina y su perfil pastoral humilde y dialogante
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