Tomás Uribe aseguró en la Revista Bocas que su vocación es ser empresario emprendedor y por eso dijo que no considera ser candidato presidencial del partido uribista, como varios quieren.

“Agradezco a las personas que nos acompañan en este camino político de mi papá y que nos han apoyado en momentos difíciles. Esa solidaridad es trascendental. Pero las elecciones de camino profesional deben surgir de una convicción propia, de una reflexión profunda”, indicó el primogénito de Álvaro Uribe.

No obstante, el empresario —que en la entrevista recordó los castigos que le dejaron huella— cree que su hermano, Jerónimo Uribe, tiene todas las características de un hombre que puede llegar a ser candidato presidencial.

“Va uno a ver y Jerónimo es más simpático que yo. Jerónimo es más querido. Si a mí me dicen, ‘¿Usted quién cree que debería ser candidato?’, diría Jerónimo. Tomás es más serio, más antipático, más con el ceño fruncido”, afirmó.

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Aseguró que a él lo metieron entre los presidenciables cuando se unió al Centro Democrático, luego de que la Corte Suprema de Justicia le impusiera casa por cárcel a su papá, pues el senador Ernesto Macías planteó esa posibilidad.

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Pese a que Tomás Uribe considera que su hermano tiene más madera para ser candidato en las elecciones presidenciales del 2022, es a él al que el país ha visto metido en temas políticos, como cuando hizo una propuesta para el salario mínimo del 2021 o cuando se despachó en contra de Gustavo Petro y Sergio Fajardo.

De Jerónimo, en cambio, poco se ha visto. Lo último que se conoce de él es que estuvo con su hermano mayor en una reunión con el presidente Iván Duque para discutir la reforma tributaria.