Las salidas de la cárcel de La Picota, en el sur de Bogotá, con el acompañamiento (que no custodia ni vigilancia) de miembros del Inpec, le acarrearon al empresario Carlos Mattos unas consecuencias que lo obligaron a reconsiderar su estrategia de defensa y a otorgarle el poder a un nuevo abogado.

El primer efecto que tuvo el informe periodístico de Noticias Caracol que mostró a Mattos saliendo de la cárcel en donde debería permanecer recluido a la espera de su juicio y dirigiéndose a su oficina en el norte de la capital fue su traslado inmediato a la cárcel de máxima seguridad de Cómbita, en Boyacá.

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Otra situación que debe enfrentar Mattos, y que no necesariamente está relacionada directamente con esas ‘escapaditas’ por las cuales la Fiscalía podría imputarle ahora el delito de fuga de presos, es que un juez le tumbó el preacuerdo que tenía listo con el ente acusador.

Ante la nueva situación, Mattos habría decidido cambiar a sus abogados, que hasta ahora venían siendo Iván Cancino y Alejandro Sánchez. Precisamente fue con Cancino con el que Mattos se encontró en su oficina el día que fue grabado por el noticiero. Cancino salió al día siguiente a dar explicaciones en los medios, que no resultaron del todo satisfactorias.

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Efectivamente, asumo la defensa técnica del señor Carlos Mattos para iniciar una negociación de un posible preacuerdo o principio de oportunidad, si es del caso”, dijo en Caracol Radio el abogado Ómar Juan Carlos Suárez, que ya pidió una reunión con el fiscal que lleva el caso de Mattos para buscar una nueva negociación.

“Esta defensa técnica está analizando las posibilidades de presentar una solicitud de principio de oportunidad a la Fiscalía. Lo que busca es aportar verdad y, una vez aportada la verdad, obtener justicia de manera pronta y segura. Bajo esos términos estamos pensando la posibilidad del principio de oportunidad”, agregó el jurista en la emisora.

Suárez precisó en el mismo medio que el hecho de que un juez tumbara el preacuerdo que tenían Mattos y la Fiscalía “no significa que se haya cerrado la puerta a la terminación anticipada del proceso a través de este mecanismo de justicia restaurativa que existe en Colombia y que es válido no solamente para el señor Carlos Mattos, sino para cualquier ciudadano colombiano”.

Según la emisora, los dos abogados Cancino y Sánchez se enteraron por un trino de Andrés González que ya no representarán al empresario. Pero ese medio planteó un problema: Mattos no tiene el paz y salvo de los dos juristas, que es indispensable en estos casos, con lo cual podría estar en problemas el nuevo defensor del empresario.