En lo que va de este año, se han reportado alrededor de 1.250 denuncias por hurto de energía en Bogotá y Cundinamarca, según datos proporcionados por Enel Colombia. Esta práctica ilegal ha sido identificada tanto en predios comerciales e industriales como en algunas zonas residenciales, y abarca diversas modalidades que van desde la manipulación de medidores hasta la conexión directa a los postes de energía para evadir la medición.

En la ciudad de Bogotá, las localidades más afectadas por pérdidas de cableado, accidentes por electrocución y caídas del servicio debido al robo de energía son Bosa, Kennedy, Fontibón, Usme, Ciudad Bolívar, Barrios Unidos y Suba.

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En cuanto a Cundinamarca, los municipios más afectados por este delito son Soacha, Zipaquirá, Madrid, Funza, Ubaté, Facatativá, Girardot, Flandes, Silvania y Fusagasugá.

Ante esta preocupante situación, Enel Colombia hace un llamado a los habitantes de Bogotá y Cundinamarca para que reporten este tipo de hechos delictivos, ya que afectan a toda la cadena de usuarios.

Por un lado, estas conexiones ilegales ponen en riesgo la seguridad de los clientes, quienes pueden experimentar fluctuaciones en el suministro eléctrico, incendios en sus hogares, daños irreparables en sus electrodomésticos e incluso un aumento en el valor de la factura. Por otro lado, aquellos que cometen el hurto también arriesgan sus propias vidas y su integridad física, ya que al manipular las redes se exponen a recibir descargas eléctricas y a enfrentar sanciones penales que pueden incluir multas y privación de la libertad por un máximo de 6 años.

Francesco Bertoli, Gerente General de Enel Grids en Colombia, expresó: “Desde Enel Colombia buscamos reducir y erradicar el hurto de energía con el fin de preservar la seguridad de nuestros clientes y de la infraestructura eléctrica. Hemos acudido a las autoridades competentes para iniciar acciones legales contra aquellos que cometen este delito. Solo en 2022, el hurto de energía ascendió a 230GWh/año, equivalente al consumo mínimo vital de energía eléctrica de Chía, Zipaquirá y Cajicá durante un año en Colombia, lo cual representa aproximadamente 145.000 hogares”.

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En cuanto a las acciones tomadas hasta el momento, se han dictado un total de 149 sentencias por hurto de energía, estableciendo sanciones para los responsables. Además, Enel Colombia ha interpuesto otras 279 acciones penales que se encuentran actualmente en proceso. Es importante destacar que el delito de defraudación de fluidos, según lo tipificado en el Código Penal, conlleva multas que van desde 1,33 hasta 150 salarios mínimos mensuales legales vigentes, así como penas de prisión que oscilan entre los 16 y 72 meses.

Entre las sentencias emitidas, se destaca el caso de una industria de plásticos que fue descubierta conectada directamente a la red eléctrica. El dueño de dicha fábrica fue condenado a 2 años de prisión.

Enel Colombia invita a la ciudadanía a denunciar este tipo de prácticas con el fin de salvaguardar la integridad y seguridad de los ciudadanos, así como el buen funcionamiento y la confiabilidad de la red de energía eléctrica. Las denuncias se pueden realizar a través de la línea telefónica de Enel Colombia: 601 5140000 para Bogotá y Cundinamarca, y se garantiza la opción de realizarlas de manera anónima.