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Los industriales colombianos comenzaron el último trimestre de 2023 en una posición débil, ya que la constante erosión de la demanda volvió a lastrar tanto los nuevos pedidos entrantes como los niveles de compras.
En este contexto, la producción de las fábricas retrocedió por sexto mes consecutivo en octubre y el sector volvió a recortar las cifras de empleo. La nota positiva la dio la débil demanda de materias primas, que obligó a los proveedores a reducir sus precios, mientras que las presiones de la competencia y los esfuerzos por impulsar las ventas propiciaron una nueva reducción de los precios aplicados a los productos finales.
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El Índice de Gestión de Compras PMI® del sector industrial colombiano de Davivienda ajustado por factores estacionales, una referencia ponderada que combina las cifras de los nuevos pedidos, la producción, el empleo, los plazos de entrega de proveedores y los inventarios de compras, avanzó desde los 47,8 puntos de septiembre hasta los 48,1 en octubre.
La última lectura señaló un deterioro adicional, aunque moderado, de la salud del sector. Así, la producción descendió por sexto mes consecutivo y coincidió con una caída de la demanda de los clientes y un contexto económico complicado.
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De hecho, el ritmo de contracción de la producción fue sólido y el más acelerado desde hace casi un año. Además, el descenso de los nuevos pedidos fue el sexto en el mismo número de meses, y las empresas destacaron la erosión de la demanda, la reducción de la inversión y un panorama de intensa competencia frente a los precios de los productos importados. Aunque la caída de las ventas fue pronunciada, el ritmo fue el más lento desde junio.
En el frente de los insumos, los precios retrocedieron por quinto mes consecutivo en octubre, lo que revierte la tendencia de incremento mensual observada desde el inicio de la encuesta en abril de 2011. El ritmo de esta reducción fue el más débil desde junio, si bien permaneció en niveles sólidos en términos generales. Las empresas consultadas explicaron que la caída de los precios internacionales, las negociaciones exitosas con los proveedores y las tasas de cambio favorables contribuyeron a la reciente disminución de los costos.
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De esta forma, los ahorros de costos, la reducción de las ventas y la entrada de productos más asequibles procedentes del extranjero se tradujeron en un descenso adicional de los precios de fábrica de Colombia a inicios del cuarto trimestre. Pese a ser moderado, el ritmo de descuento se aceleró con respecto a la lectura de septiembre.
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Por su parte, el recorte de puestos de trabajo se extendió por sexto mes consecutivo, ya que la tendencia desfavorable de las ventas se tradujo en despidos y la no renovación de los contratos provisionales. A pesar de ello, el ritmo de reducción fue mínimo y el menos pronunciado en tres meses.
Los inventarios de materias primas aumentaron en octubre por primera vez desde el pasado mes de junio, debido a la reducción de los pedidos de los clientes y las recientes medidas adoptadas para evitar el desabastecimiento de los insumos.
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Los datos de octubre señalaron un ligero exceso de capacidad en las fábricas, ya que los trabajos pendientes se redujeron por quinto mes consecutivo. Con todo, el ritmo general de la reducción fue modesto. En relación con la cadena de suministro, las empresas volvieron a experimentar retrasos en las entregas.
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El deterioro del desempeño de los proveedores se vinculó con las obras y los atascos en las carreteras. La preocupación en torno al entorno económico y las políticas públicas volvieron a empañar la confianza de los industriales en octubre. En cualquier caso, las expectativas volvieron a ser positivas y se espera que la demanda repunte y los tipos de interés desciendan.
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