El centro de pensamiento Fedesarrollo entregó recomendaciones en su más reciente análisis acerca de las reformas laboral y pensional ya radicadas al Congreso de Colombia en días anteriores.
En el caso de la reforma pensional, advierte que según los cálculos de la entidad el impacto fiscal del articulado indica en el escenario central un aumento de 30,2 puntos del PIB en el pasivo del sistema de protección en la vejez.
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De este total, 12,5 puntos del PIB son del pilar solidario, 8,4 puntos del PIB del pilar semicontributivo y 9,3 puntos del PIB del pilar contributivo.
“Estas estimaciones difieren de lo presentado por el Ministerio de Hacienda, que dice que lo reduciría en 12,3 puntos del PIB. Por un lado, el Ministerio de Hacienda no incluye en el costo de la reforma el valor del pilar solidario, que es el más costoso de todos (12,5 puntos del PIB de acuerdo con nuestros cálculos)”, se lee en el informe.
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Además, que “este valor debe incluirse porque lo relevante para la sostenibilidad fiscal es el costo fiscal del nuevo sistema de protección en la vejez, no solo el de uno de sus componentes. Además, el Ministerio hace los cálculos con corte al 2070”.
Recomendaciones para reforma pensional
En total, fueron cuatro las recomendaciones que eleva Fedesarrollo a la reforma pensional del Gobierno del presidente Petro.
La primera es acoger la propuesta del propio Fedesarrollo sobre un pilar contributivo de ahorro individual, en donde Colpensiones entraría a competir con los fondos de pensiones y otros mecanismos de ahorro de largo plazo para ofrecer cuentas de ahorro individual a los cotizantes, profundizando así la competencia.
Colpensiones adoptaría un esquema de cuentas nocionales para mitigar el impacto fiscal.
La segunda es reducir el umbral de cotización en este pilar de 3 a 1,5 salarios mínimos, con este umbral se genera la menor afectación desde el punto de vista de flujos de ahorro privado e impacto fiscal para el Gobierno nacional.
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La tercera es la implementación de una regla de ahorro más simple en la que se estipule que Colpensiones deberá ahorrar la totalidad del flujo nuevo de cotizaciones actualizado por el crecimiento de la masa salarial el producto de la población ocupada y los salarios.
Y la cuarta propuesta es ajustar el ingreso base de liquidación ampliando el periodo de cálculo de este ingreso y la tasa de reemplazo, que en la propuesta del Gobierno permanecen sin modificaciones frente a los parámetros que rigen actualmente.
“Aunque la reforma pensional apunta en la dirección correcta, en su versión actual genera una afectación excesiva en el ahorro privado, aumenta el pasivo pensional en su componente contributivo y, en las condiciones actuales genera un ahorro insuficiente, lo que deteriora aún más la posición fiscal del Gobierno nacional”, dijo el director de Fedesarrollo, Luis Fernando Mejía.
En el caso de la reforma laboral, Fedesarrollo resalta que el articulado otorgará una mayor remuneración y protección a los actuales empleados formales.
“Si bien la reforma laboral se enfoca en proteger a los actuales empleados formales, sus medidas tendrán consecuencias indeseadas en los ocupados informales y los desempleados: el aumento en los costos del empleo formal provocará un aumento del desempleo y la informalidad laboral, agravando aún más el problema de cobertura en el componente contributivo del sistema de protección a la vejez”, dijo el director de Fedesarrollo.
Recomendaciones para reforma laboral
En total, son cuatro las recomendaciones que tiene Fedesarrollo para la reforma laboral.
La primera busca diferir en el tiempo la entrada de algunas de las medidas, o condicionarlas a que la tasa de desempleo sea inferior a algún umbral (por ejemplo, 8 % promedio anual).
“El aumento de los costos del empleo formal en un contexto de desaceleración económica y tasa de desempleo aún superior al 11% agravará los problemas de deterioro en el mercado laboral que, aún en ausencia de la reforma, se verán en este año”, se lee en el documento.
La segunda es introducir una tasa de cotización en salud progresiva, iniciando en 0 % para quienes tiene ingresos iguales o inferiores a un salario mínimo y aumentado gradualmente hasta el 9 % para quienes tienen ingresos iguales o superiores a 25 salarios mínimos.
La tercera es crear un seguro de desempleo no contributivo, que puede ser financiado con una fracción de los aportes a cajas de compensación.
Y la cuarta es fortalecer la pertinencia de la formación para el trabajo. En esta los problemas de la baja productividad laboral están estrechamente relacionados con problemas estructurales en la formación para el trabajo.
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