La empresa que fundó ‘Don Jediondo’, como lo conocen en Colombia, fue admitida a mediados de 2022 en ley de quiebras en Colombia, lo que le permite continuar funcionado con normalidad. A su vez, llegó a un acuerdo con los acreedores para salvar su cadena de restaurantes y responder ante los términos exigidos por la norma.
De eso dio fe Pedro González en los últimos días, en el programa ‘La Luciérnaga’, de Caracol Radio, en el que trabaja desde hace varios años. Lo hizo al referirse al proceso de reorganización que iniciaron recientemente Oma y Presto, dos negocios que están a la espera de la decisión de la Supersociedades para entrar en ley de quiebras en el país.
Según detalló el empresario y humorista, en lo que tiene que ver con su negocio, este se mantiene cobijado por dicha norma y tiene 3 años para intentar resolver la situación, sobre todo con los acreedores que prácticamente lo pusieron sobre las cuerdas años atrás.
“A la empresa le dan 3 años de gracia. En esos tres años le congelan las obligaciones, pero tiene que ponerse de acuerdo con los acreedores para saber cómo les va a pagar. Cuando se cumplan los años, toca empezar a pagar de acuerdo con lo pactado”, explicó González, en esa emisora.
‘Don Jediondo’, además, se refirió a la crisis que viven Oma y Presto y dijo que este beneficio de la Ley de Reorganización intenta que mantengan sus actividades y les dan una mano porque son negocios que están en dificultades. Es un mecanismo legal, insistió.
La autorización la debe otorgar la Superintendencia de Sociedades, de no ser así, se pasa a la liquidación judicial. Se trata de salvar a las empresas, preservar los empleos“, informaron en el programa.
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¿Qué le pasó a ‘Don Jediondo’ con los restaurantes?
Cabe recordar que el negocio de Pedro González casi quiebra en Colombia por cuenta, entre otras cosas, de las deudas que llegaron hasta los 14.000 millones de pesos, causadas con anterioridad al 28 de enero de 2020, que fue cuando comenzó el trámite ante la Supersocedades.
El acuerdo con el ente regulador tiene una vigencia de 10 años y la intención es preservar la empresa para que mantenga su actividad económica y genere empleo. Además, pretende proteger a los acreedores hasta la fecha mencionada.
La historia del negocio del humorista vuelve a la escena por cuenta de la crisis que viven por estos días las dos compañías mencionadas. Las dos solicitaron acogerse a la ley de quiebras hace pocos días en Colombia y pretenden que, bajo diferentes medidas, pueda mantenerse el negocio y ponerse al día con sus acreedores.
“Es un recurso legal que se adopta para proteger la continuidad del negocio y el empleo, y de esta forma seguir apostándole al país como lo hemos hecho durante las últimas cuatro décadas”, anunció Presto en un comunicado.
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