
Lavar el motor del carro es una tarea que muchos conductores pasan por alto, pero que puede influir en el buen funcionamiento del vehículo y su durabilidad. Aunque mantener limpia la carrocería es algo común, pocas personas se atreven a abrir el capó por miedo a dañar componentes eléctricos o electrónicos. Sin embargo, con los cuidados adecuados, la limpieza del motor no solo es posible, sino recomendable.
(Ver también: Cinco cosas que dañan su carro sin que se dé cuenta; no ponerle cuidado le saldría costoso)
El motor acumula grasa, polvo y residuos de aceite con el paso del tiempo, lo que puede afectar el rendimiento e incluso generar malos olores. Por eso, los expertos aconsejan hacer una limpieza periódica, idealmente cada seis meses o después de recorrer largas distancias en zonas con mucho polvo o barro. Lo importante es hacerlo de forma segura, sin poner en riesgo los componentes más delicados.
Lo primero que se debe tener en cuenta es que no se recomienda lavar el motor con agua a presión, como muchos creen. La fuerza del chorro puede causar filtraciones en sensores, conectores o cables eléctricos, provocando fallas costosas. Si bien se puede usar algo de agua para enjuagar, esta debe aplicarse con mucho cuidado, preferiblemente con un rociador manual o un paño húmedo. Antes de hacerlo, es indispensable desconectar la batería y cubrir con plástico los elementos sensibles, como el alternador, la caja de fusibles y los sensores.




La forma más segura de limpiar el motor es usar productos desengrasantes específicos para automóviles, aplicándolos sobre las zonas sucias y dejando que actúen unos minutos. Luego, se debe retirar la suciedad con un trapo o cepillo suave. Algunos talleres ofrecen el servicio de “lavado en seco” del motor, una técnica que evita el uso de agua y reduce los riesgos de daño eléctrico.
Una vez finalizada la limpieza, es fundamental secar bien todas las superficies antes de encender el vehículo. También se puede aprovechar el momento para revisar posibles fugas de aceite, mangueras sueltas o cables deteriorados.
(Ver también: Empresa china de carros haría gran cambio en Colombia y el que quiera uno sería beneficiado)
En conclusión, sí se puede lavar el motor del carro, pero no con agua a presión ni de manera improvisada. Hacerlo correctamente ayuda a prolongar la vida útil del vehículo y a mantener su desempeño óptimo. Lo ideal es acudir a un centro especializado o hacerlo con las precauciones adecuadas, asegurando que el cuidado estético no se convierta en un problema mecánico.
* Pulzo.com se escribe con Z
LO ÚLTIMO