Apenas los uniformados salieron del búnker de la Fiscalía de Pereira, en donde aceptaron que violaron a una niña indígena de 12 años del resguardo embera chamí, fueron trasladados al batallón San Mateo, al que pertenecían, indicó Blu Radio.
Este viernes, serán trasladados al batallón de ingenieros Pedro nel Ospina, en Bello (Antioquia), donde, según la emisora, estarán hasta que se lleve a cabo la audiencia de la sentencia.
El fiscal general Francisco Barbosa dijo que la Fiscalía había solicitado medida de aseguramiento en centro carcelario para los señalados. El juez concedió, pero la medida se cumplirá en una guarnición militar, y no en una prisión ordinaria, como se dio a entender.
Eso, por supuesto, causó gran reproche de la ciudadanía que se vio fuertemente afectada por la atroz violación de la niña indígena.
Catherine Juvinao, por ejemplo, señaló en su Twitter que el ente acusador “bajó la gravedad del delito” y además los dejarán en una unidad militar, pese a haber confesado.
En el mismo sentido trinó la presentadora Mónica Rodríguez, que se mostró muy molesta por esa decisión: “Sexo consentido… de una niña. Lo que faltaba pues … y guardaditos y cuidaditos en guarnición militar, ah???? Lo voy a decir clarito: lo que pasa en este país es una PORQUERÍA. Da mucho ASCO”.
La situación contrasta con las declaraciones que el comandante del Ejército, general Eduardo Zapateiro, dio a los medios y en sus redes sociales, donde dijo que tomó “las medidas internas que la ley le permite” para sancionar a los uniformados, que además fueron retirados de la institución.
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