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Los incendios forestales de los últimos días en Bogotá han afectado la calidad del aire en varias zonas de la capital. Algunos comerciantes aseguran que sus ventas se han reducido.
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La capa de humo que por estos días se apodera de Bogotá también está afectando a algunos negocios de comidas, cafeterías, panaderías y tiendas ubicadas en las localidades de Chapinero y Teusaquillo.
“Nos arden mucho los ojos y se han bajado demasiado las ventas. Hay que estar limpiando las vitrinas porque se llenan de ceniza”, indicó María León, vendedora.
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En la localidad de Teusaquillo, otro comerciante dice que no está vendiendo lo mismo en su negocio de comidas rápidas: “En promedio, ayer bajaron las ventas un 20 %. Estuvo muy solo”.
El panadero Humberto Forero acotó que las personas “están dejando de comprar y se han visto muy solos en toda la zona los establecimientos”.
Los comerciantes esperan que pronto se sofoquen las llamas y se disipe el humo para que sus actividades también regresen a la normalidad.
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