Lo hicieron atendiendo una “solicitud de las autoridades judiciales de Justicia y Paz” y por vía diplomática el pasado 15 de abril.
En el documento, las entidades agregaron que están trabajando juntas para que Salvatore Mancuso comparezca ante la jurisdicción colombiana “con el fin de garantizar la consecución de la verdad, reparación y no repetición que merecen las víctimas de los delitos que se le atribuyen.
Cabe recordar que desde Estados Unidos, el otrora comandante de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) fue condenado por la justicia estadounidense a 15 años de cárcel por narcotráfico.
A ese país llegó extraditado en 2008 y desde allí ha estado colaborando con la justicia colombiana para esclarecer hechos del conflicto armado.
Entre tanto, en 2006, en Colombia se acogió a la Ley de Justicia y Paz con la que el gobierno del expresidente Álvaro Uribe logró la desmovilización de las AUC.
Durante su militancia en ese grupo a Mancuso se le atribuyeron por lo menos 300 asesinatos y la autoría intelectual de varias masacres como las de Mapiripán, El Salado y el Aro, en las que también se ha visto salpicado Uribe.
Por otro lado, en 2019 Mancuso presentó su acta de sometimiento a la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), a través de la cual se comprometió a colaborar con la reparación de las víctimas y de aportar para conocer la verdad sobre los crímenes de los paramilitares en el conflicto armado.
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