Ante la crisis que afronta el hospital Santa Ana, de Pijao, Quindío -sin médicos, sin consulta externa, con el servicio de urgencias funcionando a medias y obligado a pagar un embargo de cerca de $600 millones- el hospital San Roque, de Córdoba, se convirtió en la principal alternativa de atención para los pijaenses.
La gerente del San Roque, Johana Andrea López Marín, reconoció que desde hace 2 meses aumentó la demanda por el servicio de urgencias.
“Me he comunicado con la gerencia del Santa Ana en varias oportunidades, entendemos la situación que vive la localidad vecina en estos momentos, porque a cualquiera de nosotros, de los hospitales cordilleranos -que no contamos con muchos recursos-, nos puede suceder”, explicó López.
López Marín resaltó que han llegado personas que incluso, sin ser remitidas desde otras localidades, se atienden.
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Se ha registrado en las últimas 2 semanas que los residentes de Pijao solicitan a su EPS el traslado a Córdoba.
“Nosotros debemos brindarles todos los servicios, no solo de urgencias, sino toda la parte de controles y consulta externa. Hace poco tuvimos que atender un parto de una mujer de la zona rural de Pijao, no contamos con hospitalización, pero por la emergencia debimos actuar y en ese caso destacó el equipo de médicos por su actuar”.
Servicios sin contratiempos
El servicio de urgencias se presta sin contratiempos las 24 horas y los 7 días de la semana, así como la consulta externa que integra medicina general, también contamos con la consulta por enfermería, laboratorio, vacunación y odontología.
Así mismo, se tiene la opción de transporte básico asistencial que se hace por medio de 2 ambulancias.
López Marín dijo que se hicieron mejoras en el laboratorio clínico: “Se daban 12 cupos al día, pero ahora está constante de 7 a. m. a 9 a. m.”.
Además, en la asignación de citas hay mejoras, sin embargo, en algunos casos hay demoras debido a que la mayoría de los usuarios que se atienden presentan patologías crónicas como hipertensión o diabetes por lo que el número de consultas oscila en 300.
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“Al tener un gran número hay que hacer controles mensuales y nos ocupan la mayor parte de las agendas, al punto que aumentamos el número de médicos. La base de datos cuenta con 700 personas con estas afectaciones”, explicó.
Adicionalmente, se debe tener en cuenta el espacio para los niños y mujeres en etapa de gestación.
Finanzas y deudas de las EPS
Para la actual vigencia, el hospital San Roque dispone de $1.400 millones, en materia de pasivos, adeuda a los proveedores $40 millones.
“Podemos destacar que a todo el personal se le ha pagado a tiempo el salario, estamos al día con funcionarios de planta”, explicó Johana Andrea Pinzón Marín.
La gerente señaló que las EPS liquidadas le adeudan al San Roque $700 millones.
Explicó que la demora para pagarles a los proveedores es consecuencia de la liquidación de Medimás: “Con la EPS liquidada no tuvimos cápita en marzo, Sura tampoco lo hizo en marzo y abril, pero se puso al día con los contratos que ya hicimos, porque es la entidad que quedó con la mayoría de los pacientes”.
Sin embargo, considera que hay muy pocas posibilidades de recuperar el dinero que ingresaba Medimás: “Con ellos nos entraban $55 millones en cápita mensual, y nos quedaron debiendo un aproximado general de $200 millones”.
Aparte de Sura, el San Roque tiene contrato con La Nueva EPS, Cosmitet y la Policía Nacional.
Por ahora no hay riesgo fiscal y se han cumplido 2 años seguidos con superávit -el año anterior fue de $34 millones-, el gobierno departamental, a través de la secretaría de Salud efectúa investigaciones constantes para conocer el estado de los establecimientos médicos y, hasta ahora, no hay novedades con el San Roque.
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Personal hospitalario
El hospital San Roque dispone de 3 médicos en servicios social obligatorio, los llamados rurales. Adicionalmente cuenta con 3 galenos generales, una enfermera jefe, 5 auxiliares de enfermería, bacterióloga, ayudante de laboratorio, odontólogo, auxiliar de salud oral.
En el área administrativa, además de la gerente, trabajan asesor jurídico, contadora, ingeniera de sistemas, tesorero, secretaria, responsable del control interno y el encargado de riesgos laborales.
Infraestructura posterremoto
La estructura del San Roque es una de las más nuevas del Quindío, ya que se construyó tras el terremoto del 25 de enero de 1999.
Cumple con la normatividad sismorresistente, pero se han hecho algunas adecuaciones con el acompañamiento de la administración municipal.
“Hay un proyecto por plan bienal, gracias al cual hicimos parte de la cubierta y el cielorraso, antes se tenía icopor y no cumplía con las normas. Se organizaron puertas, se superaron humedades, ese trabajo se llevó a cabo en el 2019”, enfatizó la gerente.
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