El anuncio lo hizo este jueves el embajador de Estados Unidos en Paraguay, Marc Ostfield, en el Palacio de Gobierno en Asunción, en donde compareció en una rueda de prensa.

(Le interesa: Redes sociales fueron un arma letal en asesinato del fiscal Pecci, reveló la Fiscalía)

Según Ostfield, la recompensa por información que conduzca a la detención o condena de quienes conspiraron para el asesinato del fiscal antimafia paraguayo Marcelo Pecci, ejecutado el 10 de mayo pasado en Barú, jurisdicción de Cartagena, es de “hasta cinco millones de dólares”.

El diplomático formuló el anuncio poco después de ser recibido por el presidente de Paraguay, Mario Abdo Benítez.

Hasta ahora, por el asesinato de Pecci, cuatro personas aceptaron cargos y pidieron perdón, mientras que una quinta, Francisco Correa, presunto cerebro del asesinato, enfrentará juicio por negar su participación en el hecho. Para él, la Fiscalía General de la Nación pidió en agosto pasado una “condena ejemplar” de hasta 50 años de cárcel.

Correa, quien según la prensa colombiana es un exmilitar de 43 años que se vinculó a una banda del crimen organizado, fue capturado el 3 de junio junto a cuatro hombres que confesaron su responsabilidad. No aceptó los cargos, mientras sus cómplices fueron condenados a 23 años de prisión cada uno por el asesinato de Pecci.

En el juicio, que comenzó el 19 de septiembre, el acusado responde por homicidio agravado y porte ilegal de armas. El fiscal del caso presentó “material probatorio” que evidenciaría que Correa “coordinó” el desplazamiento de los sicarios que llegaron en moto acuática y dispararon contra Pecci cuando estaba con su esposa embarazada en una playa.

En Cartagena, Correa también contactó a una pareja para que le siguiera los pasos al fiscal paraguayo. Según la fiscalía, el exmilitar entregó “el dinero, el arma y coordinó la logística” para perpetrar el asesinato. La justicia todavía no ha determinado quiénes fueron los autores intelectuales.

Lee También

Sin embargo, el presidente colombiano, Gustavo Petro, se hizo eco de una investigación según la cual el crimen fue ordenado por el narcotraficante uruguayo Sebastián Marset, de 31 años y “prófugo de la justicia uruguaya y paraguaya”.

En Twitter Petro compartió un artículo del portal Rebelion.org en el que se señala como responsable al “clan Insfrán, red de tráfico de cocaína comandada por Miguel Ángel Insfrán Galeano y el uruguayo Sebastián Marset Cabrera”.

De acuerdo a la publicación, Correa “busca cooperar con la DEA estadounidense y con la Fiscalía General colombiana para evitar su extradición a Estados Unidos”.

Pecci, especializado en crimen organizado, narcotráfico, lavado de activos y financiamiento del terrorismo, había investigado a bandas de Brasil, además de lavadores de dinero libaneses de la Triple Frontera de Paraguay, Brasil y Argentina.

También estuvo a cargo de casos sonados como el secuestro y asesinato en 2005 de la hija del expresidente paraguayo Raúl Cubas (1998-1999), y el enjuiciamiento en 2020 del astro del fútbol Ronaldinho, detenido en Asunción por falsificación de documentos.