Después de la captura, imputación de cargos y orden de medida de aseguramiento contra los cinco implicados en el asesinato de Marcelo Pecci, el pasado 10 de mayo, el fiscal Francisco Barbosa y el director de la Policía, general Jorge Luis Vargas, entregaron nuevos detalles sobre el crimen.

De acuerdo con Barbosa, por el asesinato se habrían pagado hasta 2.000 millones de pesos y quién asumió ese costo sería una organización criminal conocida como ‘Comando Capital’, dedicada al narcotráfico y con sede en Brasil.

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El fiscal colombiano también indicó que fueron recaudados más de 200 elementos de prueba en contra de los imputados. Para esto se revisaron más de 120 cámaras de seguridad, se interceptaron 67 líneas telefónicas y se practicaron 27 entrevistas.

Redes sociales pusieron en jaque al fiscal Marcelo Pecci

El funcionario declaró que los delincuentes que asesinaron al fiscal dieron con su paradero en la isla de Barú gracias a las publicaciones que hizo en redes sociales su esposa, la periodista Claudia Aguilera.

“Aquí hay un tema fundamental: publicar en redes sociales sin responsabilidad puede convertirse en un alma letal. Los delincuentes manifestaron que en muchas ocasiones estuvieron perdidos, pero que gracias a las redes sociales lograron la ubicación del fiscal Pecci”, indicó Barbosa.

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Aguilera y Pecci estaban en Cartagena porque esta ciudad fue la elegida para pasar su luna de miel, pues habían contraído matrimonio a finales de abril y vivían unos días de descanso y playa.

Tres días antes del asesinato, la pareja del fiscal inició la publicación de diferentes postales de su viaje a territorio colombiano. De hecho, en una de ellas había anunciado la llegada de un bebé. 

En otra foto que publicó el lunes previo al atentado, la mujer escribió: “El último atardecer en Barú, pero tendremos millones más juntos”.