La alerta se da por cuenta de una investigación realizada por el buró de crédito TransUnion, que encontró que el ingreso de los colombianos y su capacidad para ahorrar se está viendo afectada por estas dos situaciones a las que muchos colombianos no les prestan mucha atención, pero que sí impactan su economía diariamente.
El estudio arrojó datos que preocupan porque señalan que el incremento de la tasa de usura, que habilita el Banco de la República para que los colombianos dejen de consumir algunos productos endeudándose, podría afectar a un gran grupo de personas, en caso de que las alzas sean muy altas.
Allí se explicó que en caso de que el 25 % de las personas con crédito no podrían asumir que sus deudas suban en 20.000 pesos. Si llegasen a subir en 50.000 pesos, el 30 % de endeudados no podrían asumir el pago. La situación se complica más si el incremento de su pago mensual sería de 100.000 pesos o más, pues entre un 36 % y 42 % de colombianos con créditos y tarjetas de crédito no podrían pagar.
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La situación ya se ha empezado a ver porque, si bien antes resaltaban que los colombianos eran buena-paga, muchas personas han visto disminuidos sus ahorros por tener que pagar las deudas con intereses mucho más altos.
Incluso, el escenario que plantea el estudio dice que si llegasen a aumentar los pagos en 50.000 pesos, unas 3,9 millones de personas saldrían afectadas. De hecho, 900.000 colombianos ya tienen deudas por 60 días de mora en algunos de sus productos crediticios.
Lo que más preocupa para es que el 71 % de las personas que están en peligro por no poder pagar sus créditos son aquellos considerados como de riesgo medio y bajo. El 43 % de ellos son de ingresos bajos.
Tarjetas de crédito y créditos: problema para los colombianos
Son millones de personas las que están buscando créditos de vivienda que tendrán que pagar en los próximos años, o tiene que buscar otros créditos de libre inversión o de consumo por diferentes razones y necesidades. De hecho, un famoso empresario señaló que no deberían hacerlo.
Las tasas de usura que fueron autorizadas en Colombia son una respuesta para combatir la inflación, pero estas afectan mayormente a las tarjetas de crédito y las compras que hacen las personas con estos plásticos.
El escenario que plantea la investigación frente a las tarjetas de crédito es que la tasa de usura llegue al 37 % y haya una tasa de inflación del 11 %. Las tarjetas de créditos son usadas mayormente para comprar muchos artículos, pero estos saldrían más caros.
Estos dos factores también afectaría a los créditos de vivienda indexados, lo que dejaría expuestos a que aproximadamente unos 731.000 consumidores terminen afectados y pagando mucho más. De estos, más de 500.000 serían vulnerables (se excluye a los que ya están en mora en algún producto) a la posibilidad de no poder cumplir con el pago mensual más alto.
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Un hecho que no es contable, pero sí muy claro es el estrés financiero de los consumidores. Además del tema de los créditos, el aumento en algunos productos y alimentos podría crear un cóctel que no es nada bueno para la salud mental de los colombianos.
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