El pan no baja de 400 pesos en la mayoría de barrios en Bogotá, pero hay un lugar en el que lo venden a mitad de precio. Queda al sur de la capital, pero está enmarcado en una linda historia.
Los dueños de este lugar son Óscar Manrique y su esposa Miriam. Ellos llevan más de 30 años juntos, pero desde hace un tiempo empezaron una labor social que actualmente tiene un gran impacto.
(Vea también: Dicen cuánto costará el pan en 2023 y muchos quedaron sin ganas de volver a comprarlo)
La historia se dio a conocer en RCN, canal en el que catalogaron este lugar como el que tiene el pan más barato de la capital, pues puede llegar a costar 150 pesos. La razón para que esto suceda es que en su localidad hay mucha necesidad y lo que sus dueños pretenden es ayudar a la gente de su alrededor.
“Acá vienen de otros barrios que tienen negocios y compran el pan. Como lo vendemos embolsado, ellos lo llevan para vender pan a 200. La mayoría de panaderías de otros lugares lo venden a 300 o 400 pesos”, dijo Manrique.
Una mogolla la vende a 200, pero como da seis por dos mil en una bolsa, estas terminan teniendo un precio más barato. “Como quien dice, sale a 150 pesos”, añade Manrique.
A quién le regalan el pan en el barrio Altamira
Óscar y su esposa Miriam son los que fabrican este pan con sus propias manos, pero detrás de su historia de pareja hay una labor de bondad con la fundación que tienen en su barrio.
Hace 35 años se han dedicado a ayudar a niños, madres de familia y adultos mayores. “Los domingos les damos desayuno a entre 70 y 80 personas. A veces el padre de acá me colabora. Me da tamales, chocolate y demás”, aseguró Manrique.
Aunque no son personas adineradas, sí buscan ayudar a quienes los rodean y por eso sacan de donde no tienen para dar estas donaciones. Eso sí, dicen, nunca les falta el pan en su mesa, literalmente.
(Vea también: El iPhone que bajó $ 2 millones y más celulares con descuento, en lugares muy reconocidos)
“Dios abunda cuando hacemos las cosas con el corazón, como esto de vender pan barato a las personas porque uno sabe la necesidad que afronta. No sabemos de dónde sale el milagro, pero nos sostenemos”, dije el hombre.
LO ÚLTIMO
.svg)
