Las instalaciones del gas deben ser revisadas periódicamente para evitar accidentes. Según Vanti, es necesario verificar que estas cumplan con la normatividad “para seguir disfrutando del gas natural en condiciones seguras”.
Según la Comisión de Regulación de Energía y Gas, la revisión debe hacerse cada cinco años y el usuario puede escoger el organismo que la hará, siempre y cuando esté acreditado. Allí se revisará la instalación interna de gas y los gasodomésticos del usuario.
Cabe resaltar que el proceso es necesario para salvaguardar la seguridad de los usuarios. Si no se hace, hay peligro de que haya incendios y explosiones, así como la intoxicación por monóxido de carbono si hay una fuga.
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¿Quién paga la revisión del gas, el arrendador o el arrendatario?
La revisión tiene un costo, lo que provoca la duda de quién es el responsable de hacer este pago, si el propietario del inmueble o el inquilino. La ley estipula que el usuario del servicio es quien debe correr con los gastos, es decir, el habitante de la casa, el apartamento o el local comercial.
No obstante, puede variar dependiendo de lo acordado en el contrato. La ley que regula los arrendamientos estipula que el arrendador es el responsable de tener el inmueble en condiciones de habitabilidad y hacer las reparaciones necesarias.
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