Se podría decir que la victoria de Deportivo Pereira sobre Junior fue uno de los partidos más emocionantes y emotivos de lo que va del año 2022 en el FPC. Pero lo ocurrido con Sebastián Viera, con su gol de penal y posterior expulsión, puso el último ingrediente en esa ‘montaña rusa’ de emociones que se vivió en el Estadio Hernán Ramírez Villegas.
La apertura del cuadrangular A tenía a los de Julio Comesaña con el ánimo golpeado, debido a la derrota en la final de la Copa BetPlay 2022 con Millonarios. Sin embargo, pudieron reponerse durante el mismo juego después de estar abajo 2-0 y después volvieron a igualar 3-3, pero al final llegó el 4-3 de los dueños de casa y el gran esfuerzo terminó sin premio.
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Pues, el entrenador de los ‘tiburones’ quiso no meter dramatismo a lo ocurrido, tampoco quiso señalar directamente a Viera, pero sí habló de lo que hacen los jugadores y que no puede pasar. Obviamente, en la cancha se vio el regaño del DT a su portero y se vendrá otra conversación seria entre ellos.
Reacción de Julio Comesaña por la insólita expulsión de Sebastián Viera en Pereira vs. Junior:
Pereira iba ganando 2-0, con los goles de Léider Berrío y Leonardo Castro, después llegó el empate de Junior por los tantos de Carlos Bacca y Didier Moreno. Después llegó la expulsión de Bacca por una entrada descalificadora y se fue con roja directa, desencadenando así que los pereiranos volvieran a tomar la ventaja con Brayan León.
A pesar de estar con un jugador menos, los de Barranquilla cargaron al ataque y un penal le dio la oportunidad a Sebastián Viera de cobrar y poner el 3-3. Pero la emoción en la celebración traicionó al portero ‘juniorista’ y se quitó la camiseta, llevando a que le pusieran su segunda amarilla y dejando a su equipo con 9 jugadores y con un jugador de campo en el arco, ya que no tenían más espacios para hacer el último cambio.
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Ante este escenario, Pereira volvió a atacar y en una de las últimas llegó el tiro de esquina, los rebotes y el gol de Jhonny Vásquez, que cerró el 4-3. Un partido lleno de emociones y que llevó a que Comesaña elogiara lo visto en la cancha: “Fue un partido extraordinario, no solo para la gente, también para nosotros. Uno evalúa después, pero uno hace parte del partido y fue un gran juego”.
Pero el experimentado entrenador sí habló de la estabilidad emocional de sus jugadores, que se evidenció en las rojas a Bacca y Viera, además de algunas discusiones entre sus jugadores, como Walmer Pacheco y Pablo Ortiz:
“Yo creo que la estabilidad emocional juega, por las distintas situaciones que se presentaron, pienso que el árbitro no hizo daño a nadie, pero lo vi muy apurado por pitar penales. El VAR, afortunadamente, le salvó la jornada al árbitro. Pero, nada puede empañar el partido de Pereira y Junior, nada puede empañar este espectáculo. Los que estuvimos acá, lo vamos a recordar por muchos años”.
Cuando le hablaron de las irresponsabilidades de sus jugadores experimentados, Comesaña dijo que no era así, pero que sí va a hablar con Viera del tema:
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“Los que hemos estado dentro de una cancha, jugando, sabemos qué es irresponsabilidad y qué no es. Es un tema que voy a hablar con los jugadores y hoy no miro eso. Las expulsiones nos dejaron en una situación muy mala… Esto de hoy, lo de Viera, lo hablaré con él. Y lo demás, hay jugadores que, por su manera de ser, ‘calientan’ los partidos y empieza el forcejeo…”
Eso sí, mandó un vainazo, porque sus jugadores protestaron decisiones arbitrales que les valieron amarillas y esa fue la razón de la primera amarilla a Viera:
“Nadie le pega a nadie, pero se va ‘calentando’; los empujones, el árbitro saca una amarilla, ya tenía una, afuera, le sacan la roja. Entonces, no aprendemos nunca, nunca aprendemos. Cuando el árbitro va al VAR, van 5 jugadores atrás, por el camino lo para otro, el otro lo quiere empujar. Cuando el árbitro pita algo, solo el VAR le puede decir que se equivocó. Pero nunca vi a un árbitro, que, porque los jugadores lo ‘aprietan’, cobre distinto”.
Para finalizar el tema, Julio Comesaña volvió a hablar de la estabilidad emocional y que ellos mismos son responsables de lo que les pasó:
“Me quedó con el espectáculo, es un tema emocional, a veces uno dice: Nos faltó madurez, nos faltó templanza. Porque era un momento favorable para nosotros y complicado para el Pereira. Y nosotros nos metimos en ese ‘enredo’ y pasó lo que pasó. Ya está, no vamos a dejar de dormir por eso”.
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