Se trata de uno de los más destacados eventos de los circuitos de la ATP y la WTA, que debía iniciarse este lunes en el desierto de California.
La decisión de suspenderlo se tomó este domingo luego de que “el Departamento de Salud pública del condado de Riverside declaró una emergencia sanitaria para el valle de Coachella tras un caso confirmado de coronavirus a nivel local”, indicó la organización del torneo en un comunicado.
Esta es la primera cancelación de un gran evento deportivo a raíz del brote en Estados Unidos, donde la epidemia ya llegó a 30 de los 50 estados que integran ese país.
Indian Wells, donde se esperaba la presencia de figuras como Rafael Nadal o Novak Djokovic, es uno de los torneos más importantes de tenis fuera de los 4 Grand Slams, y es también el primero de los 9 Masters 1000 de la temporada.
Los organizadores habían adelantado que planeaban reforzar las medidas sanitarias en las instalaciones pero finalmente optaron por la cancelación después de que el Departamento de Salud Pública confirmara el mencionado contagio en el estado de California.
“Estamos muy decepcionados de que el torneo no vaya a jugarse, pero la salud y la seguridad de la comunidad local, aficionados, jugadores, voluntarios, patrocinadores, empleados, vendedores y todo el mundo involucrado en el evento es de una importancia primordial”, declaró el director del torneo, Tommy Haas.
Justo millones de personas en California, Nueva York y más recientemente Oregon están bajo estado de emergencia por el COVID-19.
Entre tanto, este domingo seguía varado, por cuarto día en las costas de California, el crucero Grand Princess, donde hay 21 infectados entre las 3.500 personas a bordo, y se espera su desembarco en Oakland el lunes.
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