- Un poco de la historia de este plato
Originarios de la región de Bretaña al oeste de Francia, este plato es toda una tradición. Se obtienen por la cocción de la pasta extendida en forma de circular o de disco y se cocina por sus dos caras, hasta que se dore. Expertos en el tema han concluido que las crepas fueron el reemplazo de uno de los alimentos más importantes del mundo: el pan.
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Aunque este último es preferible comerlo a temperaturas tibias para disfrutar de todo su sabor, las crepas por el contrario se pueden comer frías o calientes. Varios restaurantes en el mundo han decidido incluirlas en sus menús, llevándose gratas sorpresas, no solo por las fusiones increíbles que se encuentran dentro de ellas para sus comensales, sino porque también tienen un plus diferencial en su oferta: pueden ser de dulce o de sal. Algo a lo que definitivamente ningún amante del buen comer se puede negar.
Los crepes son deliciosos en todas sus presentaciones y lo mejor es que son altamente versátiles, pues los podemos acompañar con muchas cosas.
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Cómo preparar crepes de arequipe y queso
En un bowl agrega 1/2 taza de agua, 2 huevos, 1 taza de leche, 1/4 de taza de mantequilla derretida, 1 taza completa de harina y una pizca de sal. Mezcla y lleva la preparación 15 minutos a la nevera.
Agrega la mezcla en una sartén, esparce bien y ve volteando por el otro lado hasta que queden doraditos.
Rellena con arequipe, dos tajadas de queso, y ve cerrando todas las puntas hasta que quede en forma de crepe. Disfruta calientico a cualquier hora del día.
¡Trucos de la abuela!
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