Escrito por:  Redacción Nación
Jun 11, 2025 - 11:00 pm

El reciente atentado contra Miguel Uribe Turbay, reconocido dirigente político y precandidato presidencial, sigue causando conmoción en Colombia por las últimas imágenes que fueron reveladas de momentos antes del atentado.

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Gracias a videos obtenidos por Noticias Caracol y otras investigaciones periodísticas, se han esclarecido varios detalles clave sobre la manera en que se ejecutó el ataque ocurrido en el barrio Modelia de Bogotá, el pasado 7 de junio.

Según el material audiovisual, el agresor, un adolescente de 15 años, no actuó en solitario. Las cámaras de seguridad captaron cómo el joven llegó acompañado, custodiado y asistido por al menos otras cinco personas, reforzando la hipótesis de una operación planificada con precisión y anticipación.

Una secuencia de los videos muestra que a las 3:32 de la tarde, el menor descendió de una motocicleta en una esquina de Modelia, se quitó el casco y de inmediato se colocó una gorra. No venía solo: el conductor de la moto también bajó e intercambió palabras con él. Mientras tanto, el adolescente manipulaba su celular, aparentemente siguiendo indicaciones o confirmando instrucciones.

Minutos después, alrededor de las 3:41 p. m., un vehículo particular, un carro gris, aparece en la calle. El joven cruza la avenida y sostiene una breve conversación con el conductor para luego continuar su camino de manera tranquila, siempre enfocado en su teléfono móvil.

Señalado de disparar a Miguel Uribe recibió instrucción de motociclista

Las grabaciones evidencian el uso de claves gestuales. Por ejemplo, el motociclista le indicó la dirección por donde debía caminar estirando el brazo y señalando el camino.

Sin dudarlo, el adolescente acató la instrucción, ajustó su gorra, guardó el casco y avanzó. El joven aparentaba conocer de antemano la ruta a seguir, lo que indica que nada fue dejado al azar. Estas acciones coordinadas resultaron clave minutos antes de que se cometiera el atentado, que hoy mantiene a Miguel Uribe Turbay delicado de salud.

Después del ataque, las autoridades profundizaron las investigaciones para determinar la identidad y el rol de cada una de las personas que acompañaron y asistieron al menor. Todo parece indicar que el adolescente fue solo la cara visible de una estructura más grande y organizada. La presencia de vehículos de apoyo y la coordinación a distancia por medio de teléfonos levantan interrogantes sobre los móviles y los responsables intelectuales del crimen.

Además, otros elementos investigativos, como la posible utilización de pagos electrónicos a través de plataformas como Nequi y declaraciones de testigos, han sido dados a conocer por medios como BLU Radio. Incluso, una mujer involucrada en el caso decidió romper el silencio y aportar más detalles sobre el modus operandi de los responsables.

El caso ha impactado al país por el uso sistemático de menores en delitos graves y la capacidad de planificación de las redes delincuenciales. La recolección de huellas dactilares y el análisis de llamadas serán determinantes para identificar y capturar a todos los implicados.

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