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Escrito por:  Fabián Ramírez
Subeditor     Jun 29, 2025 - 10:15 am

Durante el actual Gobierno de Gustavo Petro, el exministro de Relaciones Exteriores Álvaro Leyva intentó, sin éxito, conspirar para destituirlo. Esta información, publicada por El País, revela que el excanciller cortejó a asesores de la administración de Donald Trump para obtener apoyo a nivel internacional con el fin de forzar la salida de Petro del poder.

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Según audios obtenidos por el citado medio, Leyva incluso llegó a acercarse a Marco Rubio, en su momento secretario de Estado de EE. UU., en su misión destituyente. Afirmando tener “todas las herramientas para ejecutar un plan y sacarlo (refiriéndose a Petro)“, plan que supuestamente involucraba a actores armados y no armados. Leyva argumentaba poseer evidencias que inhabilitaban a Petro para gobernar, describiéndolo como un individuo errático con serios problemas de drogadicción.

“Hay que sacar ese tipo. Ese tipo presidiendo las elecciones [las presidenciales que están por celebrarse en 2026]… es que, además, el orden público se desbordó. Eso no puede suceder, sino con un gran acuerdo nacional, en donde tiene que estar, Eln, los del Clan del Golfo. […] Yo he hablado con los gremios más importantes […]. Es que aquí han venido los del Clan del Golfo, una vaina muy jodida. Este país va al despeñadero”, indicó.

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Pese a lo alarmantes de estas acusaciones, El País informó que la Casa Blanca no consideró la propuesta de Leyva. Del mismo modo, la vicepresidenta Laura Sarabia y Petro han negado categóricamente las acusaciones, calificándolas de difamación.

Las grabaciones de Leyva muestran también su interés porque la vicepresidenta Francia Márquez asuma la presidencia si Petro fuera depuesto. Sin embargo, tras la difusión de estos audios, Petro confrontó a Márquez, creando una tensión que rompió definitivamente la relación entre ambos, de acuerdo con el citado medio.

Curiosamente, el exministro Leyva fue un tiempo un aliado cercano de Petro. Su rol incluyó la negociación de acuerdos de paz con grupos armados y el restablecimiento de relaciones con Venezuela. Sin embargo, fue marginado del Gobierno en noviembre de 2024, cuando la Procuraduría lo inhabilitó a petición del presidente.

Ahora, hundido en la deslealtad, Leyva se encuentra refugiado en Madrid, mientras el paisaje político colombiano permanece turbulento y la posibilidad de un golpe de Estado parece más remota que nunca. 

Este episodio cobró mayor relevancia con las declaraciones de la canciller Laura Sarabia, quien criticó duramente al exministro. “Su ambición desmedida por el poder lo llevó a conspirar contra la institucionalidad colombiana”, enfatizó Sarabia en declaraciones públicas.

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Es importante recordar que Leyva ya había protagonizado polémicas por irregularidades durante su gestión como canciller. Este nuevo episodio pone en jaque la estabilidad política en Colombia y abre un debate en torno a la legitimidad del mandato presidencial y la defensa de las instituciones democráticas en el país.

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