Las controversiales declaraciones del ministro de Transporte, Guillermo Reyes, en las que advirtió a la alcaldesa Claudia López que si no acepta las modificaciones propuestas por el presidente Gustavo Petro al Metro de Bogotá, “en la medida que el Gobierno financia el 70 % de otros proyectos, esos también se van a tener que parar”, le valió al funcionario una citación a debate de control político en el Congreso.

La sesión, que se llevó a cabo este miércoles, fue convocada por los senadores David Luna (Cambio Radical) y Miguel Uribe Turbay (Centro Democrático) y tuvo como objetivo pedirle al ministro Reyes explicaciones sobre sus declaraciones. Pero, más allá de eso, los congresistas de oposición pidieron al funcionario comprometerse a nombre del gobierno Petro con la financiación no solo del Metro de Bogotá, sino de las demás obras de infraestructura y movilidad para Bogotá.

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Al debate en la Comisión Accidental del Metro en el Congreso asistieron, además de los citantes, representantes a la Cámara por Bogotá y el gerente de la Empresa Metro de Bogotá, Leonidas Narváez. En la sesión primó la insistencia de los citantes, e incluso Luna le pidió al ministro que se comprometiera a girar $2,4 billones este año para las obras que están en marcha y que, según el Distrito, tienen un 18 % de avance.

El senador de Cambio Radical fue insistente en comprometerse con el país y con los bogotanos “sin ninguna condición, contrario a lo asegurado en días pasados” para la financiación del metro y remarcó que, si se hace una modificación al proyecto, que calificó como “un capricho del presidente”, habrá un retraso de hasta 10 años en la ejecución de las obras.

En eso coincidió el senador Uribe Turbay, quien definió el debate como una muestra de que “todos queremos un metro para la ciudad, queremos respaldar la primera línea y estamos en contra de que haya una demora de más de 10 años”. Además, el congresista del Centro Democrático manifestó su preocupación por la posición del Gobierno frente a los otros proyectos que debe cofinanciar la Nación como los Regiotram, los cables aéreos, los accesos norte, la calle 13, ALO sur y la segunda línea del Metro.

“Le pedimos al Gobierno y al presidente Petro sensatez, no es cierto que el metro subterráneo esté listo”, aseguró el senador de la oposición. En medio de este escenario, el ministro de Transporte resaltó el compromiso del Gobierno de girar el dinero que necesita el proyecto para las obras de 2023 y precisó que “la Nación garantizará los recursos para la primera línea del Metro”.

“Para su tranquilidad”, le dijo el ministro Reyes a Luna, “Bogotá tiene garantizado ‘medio’ Metro”, en referencia a la posición del Gobierno de que el proyecto de metro es insuficiente para lo que necesita una ciudad capital como Bogotá. “Los ciudadanos quieren uno entero”, le replicó el senador de Cambio Radical.