Este 13 de mayo, la Administración Distrital dio inicio a la recuperación del Parque Nacional, ubicado en el centro de Bogotá. El panorama que se encontraron los funcionarios fue bastante complejo: palos rotos que serían de árboles de la zona, restos de ropa y hasta botellas de trago, que quedaron en el espacio que albergó a las 792 personas durante ocho meses.

El operativo de desmonte de los cambuches y recuperación del parque está en manos de la Uaesp (Unidad Administrativa Especial de Servicios Públicos), entidad que desplazó todo su recurso humano, técnico y operativo para atender esta contingencia. Más de 110 personas, entre funcionarios de la entidad y operarios de aseo, llevan a cabo la intervención.

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Según indicó Felipe Jiménez, secretario de Gobierno de Bogotá, el trabajo se extenderá por cerca de un mes y medio. “Primero es la limpieza y recolección de escombros, luego lavado y desinfección, posteriormente la Secretaría de Salud hará operación de vectores y salud pública y, para finalizar, todo el equipo institucional del Distrito, liderado por la Secretaría de Ambiente, el Jardín Botánico y el Idiger, hará la recuperación del material vegetal y zonas verdes”, detalló.

“Hasta el momento se han recogido 49 toneladas de residuos y en el operativo se han utilizado 22 vehículos especiales para limpieza y remoción de materiales: 3 cargadores, 2 compactadores, 3 hidrolavadoras y 14 ampliroll”, indicó la Uaesp.

La secretaria de Ambiente, Carolina Urrutia, expresó que el objetivo es que para este domingo esté recuperada la zona más cercana a la carrera Séptima, para complementar las actividades de la ciclovía. Los sectores restantes permanecerán acordonados.

Sobre la capa vegetal que se vio afectada por los cambuches, Martha Perdomo, directora del Jardín Botánico, explicó que “hay una significativa afectación”, en la que asombra la cantidad de árboles que fueron talados.

“Identificamos de manera preliminar la pérdida de 70 árboles jóvenes y pérdida de la cobertura vegetal de prado. Tendremos que recuperar el tema de césped, arbolado y jardinería”, detalló.

Finalmente, el secretario de Salud indicó que por los restos de comida que dejaban los indígenas, hay zonas infestadas de roedores. “Apenas los funcionarios de la Uaesp terminen la limpieza, nosotros empezamos el proceso de desratización y posteriormente de fumigación”, comentó.

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Así se ve el Parque Nacional luego de la primera jornada de limpieza: