El ministro de Educación, Alejandro Gaviria, causó gran polémica en el país luego de anunciar que el informe de la Comisión de la Verdad será mostrado en escuelas y colegios de Colombia. Según explicó en su momento, el objetivo del Gobierno es que las nuevas generaciones conozcan el pasado de Colombia y las investigaciones en torno al conflicto armado y el acuerdo de paz.

El informe comenzó a enseñarse en las instituciones educativas de Bogotá el pasado 12 de agosto y, desde entonces, diversos sectores han expresado su rechazo. La congresista del Centro Democrático Paloma Valencia fue una de las primeras voces de oposición en brincar por la determinación. En su cuenta de Twitter, manifestó que se trata de un “adoctrinamiento inconstitucional y totalitario” que busca “imponer la verdad de la izquierda” a los niños.

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Uribismo presentó proyecto contra “adoctrinamiento” en colegios

La propia Paloma Valencia y los congresistas Alirio Barrera (Centro Democrático) y Miguel Polo Polo radicaron en las últimas horas un proyecto de ley con el cual buscan evitar los presuntos adoctrinamientos en los colegios del país. 

Valencia expresó este martes 20 de septiembre en una rueda de prensa que la iniciativa surge porque Colombia es un Estado laico y pluralista, según quedó consignado en la Constitución de 1991. Esto, por ejemplo, llevó a que en las instituciones de dictarán clases de religión con el visto bueno de los padres y en torno a las ideologías de cada nucleo familiar.

“Usted puede enseñar una afiliación política con la autorización de los padres y con la obligatoriedad de que no solamente va a enseñar una doctrina política, sino que dará espacio en su clase para que todas las vertientes políticas puedan ser explicadas y entendidas por los estudiantes”, dijo.

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En caso de que el proyecto supere los cuatro debates en el Congreso de la República, detalló la senadora, no se permitiría que la Comisión de la Verdad sea enseñada en las escuelas sin la autorización previa de los padres o acudientes. Además, remarcó que también deberían presentarse “una versión de las Fuerzas Armadas, ojalá de los empresarios” y otras más que permitan “el diálogo democrático”.

En consonancia, Miguel Polo Polo aseguró que ha sido testigo de cómo los profesores han “adoctrinado durante mucho tiempo a jóvenes para que abracen las ideas de izquierda”.

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