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En la mitad de una quebrada, agachado, llorando y tocando el cuerpo de Junior Alexánder Ruiz Tamayo, terminó uno de sus familiares.
El hallazgo del cuerpo de este joven de 23 años de edad, quien se encontraba desaparecido, ocurrió el pasado viernes, 15 de diciembre, en la quebrada La Limona del corregimiento de San Antonio de Prado, suroccidente de Medellín.
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A eso de las 10:30 de la mañana comerciantes y transeúntes observaron el cuerpo e informaron a las autoridades. Los familiares de este joven también fueron alertados, llegaron al sitio y lo cubrieron con una sábana.
Los bomberos también se desplazaron al sector, recuperaron el cuerpo y lo dejaron en poder de las autoridades para la inspección judicial. Luego del procedimiento encontraron que el joven tenía heridas por arma de fuego y arma blanca.
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Y es que la última vez que sus familiares lo habían visto con vida, fue el pasado miércoles, cuando había salido de su casa ubicada en el sector Belén del mencionado corregimiento, a verse la final entre el Independiente Medellín y el Junior de Barranquilla. Esa noche no regresó a su casa, lo que motivó a sus familiares a iniciar con la búsqueda al día siguiente.
El jueves no tuvieron noticias de él, pero el viernes en horas de la mañana se enteraron de que había sido asesinado y estaba siendo arrastrado por la quebrada.
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Pero, ¿por qué lo mataron? Fuentes consultadas por Q’HUBO informaron que se trataría de un ajustes de cuentas y que detrás del crimen estaría una estructura criminal que delinque en el corregimiento.
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