Oviedo contó cómo fue el momento en el que confesó su orientación sexual ante su familia y los problemas que eso le generó, especialmente con su madre.
El saliente director del Dane se convirtió en uno de los funcionarios más mediáticos del gobierno de Iván Duque y saltó a la fama por su particular tono de voz que tiene un origen médico.
Aunque siempre fue reservado, Oviedo aprovechó que su período en el cargo está a punto de terminar para hablar de su balance laboral, pero también de su vida privada.
El funcionario contó que hace poco estuvo en la marcha del orgullo LGBT por convicción propia, ya que siempre ha pertenecido a la comunidad. Esto, a pesar de los encontronazos que tuvo con su madre.
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“Creo que mi mamá no me perdona eso. Que yo sea gay. Es una de sus frustraciones. Porque ningún novio le ha parecido bueno. Tal vez ella siempre ha soñado con tener un nieto o una nieta mía”, indicó Oviedo en diálogo con la revista Bocas.
Añadió que en su adolescencia salió con mujeres, pero que descubrió su orientación estando en Francia mientras estudiaba.
“En el segundo año de mi doctorado me gané un ‘internship’ en una empresa de consultoría en Londres, y allá conocí a un man que vivía en París. Benoit. Empezamos a tener una relación a distancia, muy linda”, confesó en ese medio.
Oviedo aclaró que mantiene una relación estrecha con su madre, a pesar de que ella no estaba del todo a gusto a conocer de su orientación sexual, la cual hizo pública en redes sociales.
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