La reforma tributaria que presentó el Ministerio de Hacienda al Congreso de la República no contempla que las iglesias paguen impuestos, ya que no son entidades con ánimo de lucro. Sin embargo, en las últimas semanas empezó a crecer la iniciativa de algunos sectores para que estas organizaciones religiosas hagan sus aportes a la economía colombiana.

Una de las impulsoras de esta iniciativa es Katherine Miranda, representante a la Cámara por la Alianza Verde. La congresista aseguró que está recogiendo las firmas de más de 100.000 ciudadanos que piden impuestos para las iglesias. Según su parecer, si bien hay algunas que cumplen una función social, existen otras que están “acumulando riquezas”.

(Vea también: Tinto también se encarecería con reforma tributaria: a cafeteros se les acabaría beneficio)

Gustavo Bolívar criticó a iglesias que no quieren pagar impuestos

A propósito de esta discusión, el congresista del Pacto Histórico cuestionó a las instituciones religiosas que no están de acuerdo con pagar tributos en el futuro. En su cuenta de Twitter, Bolívar sostuvo que, por el contrario, deberían acceder “sin tanto drama”.

Si no dan ejemplo de solidaridad y piedad con los más pobres están traicionando la palabra de Jesús”, dijo el senador.

No es la primera que Bolivar lanza comentarios contra las iglesias. En días anteriores, se había preguntado por qué estas sí podían “cobrar un diezmo a los feligreses”, pero no estaban en la capacidad de hacer un aporte tributario. “No pueden seguir enriqueciéndose sin un gesto de solidaridad con esos millones de hijos de Dios que aguantan hambre“, apuntó en sus redes sociales.

Lee También

Luego de todas las plegarias, el ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, abrió la puerta para estudiar la posibilidad de que las iglesias paguen impuestos. No obstante, precisó que su eventual inclusión en la reforma tributaria dependerá del apoyo de las distintas comisiones del Congreso.

La discusión de la reforma tributaria inició el pasado martes 23 de agosto, en la Comisión III del Senado y la Cámara de Representantes. Esa fue la oportunidad para que los diversos partidos políticos expresaran sus inquietudes con respecto al proyecto.