En la grabación, que publicó Blu Radio, se ve a Gareth Sella cuando es auxiliado por varios gestores de convivencia del Distrito, que en medio del desespero por verlo herido intentan parar un taxi en la calle.

“¡Párelo, párelo!”, grita uno de los gestores, mientras otro le advierte al taxista que negarse a prestar auxilio “es omisión de socorro”.

Es ahí cuando varios jóvenes con chaquetas de la Secretaría de Gobierno (de color blanco), gestores de convivencia (chaquetas de color naranja) y otras personas más, rodean el vehículo para que el conductor transporte al herido hasta un hospital.

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El hecho se registró sobre la calle 22 con carrera 12, y para ese momento el joven ya tenía su ojo vendado.

La emisora publicó la declaración que dio un testigo según la cual “ningún taxi lo recogía” para trasladarlo a una clínica, y que esa situación de angustia fue la que llevó a los gestores a obligar al conductor del taxi a que prestara el servicio.

“El venía muy pálido, estaba vomitando”, aseguró el testigo en la frecuencia.

Gareth Sella sufrió trauma severo en un ojo en choque con el Esmad de la Policía

Horas después de este incidente, la alcaldesa Claudia López confirmó que el joven sufrió un “trauma severo en su ojo”, y este jueves se volvió a pronunciar sobre el caso para pedirle a la Policía que no se “estigmatice a Gareth por cómo se viste”.

Esto, porque el general Óscar Gómez Heredia, comandante de la Policía Metropolitana de Bogotá, reveló varios videos para mostrar que esta persona, al parecer, es la misma “que estaba encapuchada” en las protestas.

También se conoció otro video que explicaría por qué iniciaron los enfrentamientos entre los estudiantes y los agentes del Esmad, y es que un policía que no hacía parte del grupo de acompañamiento a la marcha, y que estaba en moto, habría provocado a los jóvenes, según denunció la concejal Susana Muhamad.

De hecho, en la grabación se aprecia cuando el coronel Édgar Cárdenas detiene al policía para preguntarle qué hacía en ese sitio y por qué había dejado la moto parqueada en la calle, ya que un grupo de jóvenes la tumbó al piso en medio del alegato con el uniformado.

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