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En los últimos días, el barrio La Isabela, ubicado en la comuna 1 de Armenia, ha sido escenario de una particular intervención policial. El Grupo de Acción Unificada por la Libertad Personal (Gaula) de la Policía en Quindío acudió a esta zona tras detectar un aumento en una modalidad de extorsión que afecta principalmente a pequeños comerciantes. Durante la jornada, cerca de cien personas recibieron información clave y orientación sobre las formas en que los delincuentes están aprovechando la exposición de datos personales para llevar a cabo sus delitos, según reportes de Crónica del Quindío.
El principal riesgo radica en la tendencia de los tenderos a publicar sus números de teléfono en lugares visibles, con el propósito de facilitar pagos mediante transferencias electrónicas. A pesar de que esta práctica representa una solución práctica e inmediata para los propietarios, las autoridades advierten que expone gravemente a los negocios ante la criminalidad. Los delincuentes, aprovechan estos números expuestos, los anotan al ingresar a los establecimientos, y posteriormente dan inicio a cadenas de mensajes y llamadas intimidatorias a través de aplicaciones como WhatsApp. Este patrón de conducta ha sido advertido por el Gaula, cuyos integrantes subrayan que se trata de delincuencia común, aunque, hasta el momento, no se ha detectado la presencia de estructuras criminales organizadas dedicadas exclusivamente a la extorsión en la región.
El impacto de esta situación va más allá de los retos económicos. Se han registrado casos en los que la intimidación ha escalado a tal punto que han provocado ataques físicos contra los negocios. Un ejemplo extremo es el testimonio de una familia que, tras recibir amenazas y negarse a pagar la extorsión, fue víctima de un atentado contra su tienda y se vio forzada a abandonar tanto el hogar como el comercio, recurriendo a la línea 123 para reportar el incidente antes de salir de la ciudad.
Frente a este panorama, la estrategia de prevención ha cobrado especial relevancia. El Gaula recomienda evitar la exhibición del número telefónico y, en su lugar, sugiere utilizar el código QR para los pagos electrónicos, herramienta que permite concluir las transacciones sin revelar información privada al cliente o a terceros.
Este cambio de hábito es concebido como un mecanismo efectivo para reducir la vulnerabilidad frente a las extorsiones. De acuerdo con los agentes policiales, la prevención es la principal barrera: si el delincuente no accede al número, no puede iniciar el proceso de intimidación. Además, bajo el lema “¡Yo no pago, yo denuncio!”, la Policía enfatiza la importancia de denunciar cualquier intento de extorsión, recordando a la ciudadanía utilizar la línea gratuita 165 y el número 3178965540 del Gaula para recibir orientación y acompañamiento oportuno.
En palabras del personal policial, exponer el número en el negocio equivale a dejar la llave de la casa en la puerta, facilitando el acceso a extraños. En contraste, el uso de códigos QR refuerza la seguridad y pone un cerrojo a la privacidad de los comerciantes.
¿Cómo funciona el código QR en los pagos y por qué es más seguro que exponer un número telefónico?
Con la creciente digitalización de los pagos, el uso del código QR se vuelve cada vez más relevante para los comercios locales. El código QR, una matriz gráfica que almacena información y puede ser escaneada por teléfonos inteligentes, permite efectuar transferencias electrónicas sin necesidad de suministrar datos personales como el número de teléfono. Esta tecnología garantiza que la información del comerciante se mantenga protegida y fuera del alcance de personas malintencionadas.
La seguridad surge precisamente porque con el escaneo del código, los clientes sólo acceden a los datos bancarios estrictamente necesarios para completar la transferencia, imposibilitando el contacto directo posterior. Así, el código QR se presenta como una herramienta eficaz para disminuir riesgos y salvaguardar tanto el patrimonio como la seguridad de quienes viven del comercio en barrios como La Isabela.
* Este artículo fue curado con apoyo de inteligencia artificial.
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