En medio de las chispas que saltaron este martes en el fallido inicio del debate a la reforma a la salud en la Comisión Séptima de la Cámara de Representantes hubo una que llamó la atención porque implica un ataque ya no al texto del proyecto, sino a la jefe de la cartera, Carolina Corcho.

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Esa chispa salió del expresidente y director del Partido Liberal, César Gaviria, que ha liderado la oposición a la iniciativa gubernamental prácticamente desde el comienzo, pues viene planteando que la propuesta de Corcho busca acabar con el sistema de la salud en Colombia.

A Gaviria se le han unido Efraín Cepeda, presidente del Partido Conservador, y Dilian Francisca Toro, directora del partido de La U, con sus respectivas colectividades, que tampoco están satisfechas con el hecho de que las observaciones que han hecho a la reforma a la salud no hayan sido incluidas por la ministra Corcho.

Todos han reprochado el texto de la reforma a la salud, incluso Gaviria que, hasta este martes, insistía en que “la propuesta original del Gobierno desconocía elementos que son muy importantes dentro del sistema [de salud], pero por sobre todo era un sistema que quería empezar desde cero”.

“Ellos [el Gobierno] querían acabar con el sistema, que hay y arrancar con un sistema desde cero, todo estatizado, y pues eso no hace mucho sentido”, dijo el expresidente justo el día en que comenzaba el debate de la iniciativa en el Congreso.

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Pero después se refirió de manera directa a la ministra Corcho, y la acusó de entorpecer. “No entiendo bien por qué esa señora es ministra de Salud, si ha sido la principal interferencia que ha habido para poder hacer un trato, para poder hacer cambios”.

“Ella desconoció por completo que en el Congreso había partidos políticos y que había dirigentes —continuó Gaviria—. Se metió a desconocer a todo el mundo, a desconocer las asociaciones de médicos…”.

La crítica de Gaviria a Corcho como alta funcionaria del Gobierno también constituye una descalificación para el presidente Gustavo Petro, que fue quien la nombró. Esto escala las diferencias entre el expresidente y el actual mandatario, más bien escasas al comienzo por haber estado el liberalismo en la aparentemente poderosa coalición de Gobierno.

A la ministra Corcho estos los tres partidos políticos que se oponen a la reforma a la salud la señalan de, reiteradamente, no incluir las observaciones que le han hecho al texto. Dicen que una cosa se hablaba en las reuniones técnicas, una cosa era lo que se acordaba incorporar al proyecto, pero otra era el documento que les entregaban en el que prevaleció siempre la idea de Corcho.

Esa actitud fue la que llevó finalmente a las colectividades políticas a radicalizar sus posturas al punto de poner en jaque el trámite de una de las reformas más importantes para el Gobierno de Gustavo Petro.