Prado, de 35 años y nacida en Quibdó, tiene un doctorado en astrodinámica y aplicaciones espaciales, fue contratista de la Nasa y hoy trabaja para una empresa que monitorea satélites espaciales, en California, Estados Unidos, detalló Noticias Caracol. 

La científica, que con su trabajo mantiene a flote algunos servicios específicos de compañías como Google y Bing, estudió una maestría y un doctorado en Estados Unidos, aunque este último le ha causado varios problemas que, incluso, afectaron su salud, añadió ese noticiero.

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Después de trabajar como contratista para la Nasa en su sede de Maryland, Prado tomó la decisión de estudiar un doctorado en la Escuela de Ingeniera Aeronáutica y Astronáutica de la Universidad Purdue (la misma de la que se graduó Neil Armstrong, el primer hombre en pisar la luna), agregó ese informativo. 

El crédito-beca que sacó con Colciencias (hoy Ministerio de Ciencia) y Colfuturo, en 2014 y por un 25 % del total del doctorado, se convirtió en una pesadilla cuando, por culpa de deterioros en su salud y un retraso en su proyecto de grado, la fecha probable de culminación de estudios se le corrió dos años (de 2018 a 2020), indicó ese canal. 

Así las cosas, Colfuturo la contactó en 2018 y le pidió explicaciones por el retraso en su proyecto de grado, así como el aplazamiento de lo que debía ser la fecha en que empezara a pagar el crédito-beca. 

Ella, que sufrió de una dura depresión en esa época, habló con Colfuturo y la entidad colombiana le dijo que tenía que mandar una carta de su directora de investigación en la que se justificara la demora en la culminación del doctorado. 

Prado envió un documento en el que su universidad constataba que la nueva fecha de grado era en 2020. Sin embargo, esto no satisfizo a Colfuturo, que pidió reiteradamente una carta firmada por su directora de investigación. 

Finalmente, en diciembre de 2018, Colfuturo le informó a Prado que su beca del 25 % del doctorado ya no era condonable y ahora tenía que pagar lo que le habían prestado. A día de hoy, con intereses, esa deuda llega a los 400 millones de pesos.

Esta es la primera parte del testimonio de Prado, en Noticias Caracol:

“Son 2 años de intereses, casi 85 millones de pesos en intereses; por el 25 % de financiación, porque ellos me dieron el 25 %. El 75 % me lo dio este país (Estados Unidos) que es adoptado. Estados Unidos financió el 75 % de mi doctorado y yo a Estados Unidos no le debo un peso”, manifestó Prado, en Noticias Caracol. 

Eventualmente, la científica chocoana terminó su doctorado en 2020. En ese mismo año, su directora de investigación había enviado una carta a Colfuturo en la que se justificaban los retrasos en la fecha de culminación de estudios. 

A pesar de que era lo que habían pedido desde un inicio, en Colfuturo dijeron que la carta era extemporánea y que se mantenía firme la intención de cobro, diciendo que aceptar el documento era injusto con los más de 8.500 becarios de la entidad. 

Ante el ida y vuelta, Prado puso una tutela en Colombia y está esperando a que la situación jurídica se defina. Entre tanto, el abogado de ella dice que el Gobierno Nacional viene actuando más como un banco que como un potenciador del conocimiento en el país. 

En conversación con ese noticiero, Colfuturo aseguró que Prado tiene hasta 15 años para pagar esa deuda y que, a diferencia de un banco, ellos llevan más de 2 años sin hacer efectivo el cobro jurídico. Asimismo, piden que se cancele la deuda para que los recursos sean reasignados a otros jóvenes que quieren estudiar con un crédito-beca en el exterior. 

Finalmente, la viceministra de Ciencia, Ana María Aljure, recalcó a Noticias Caracol que el error fue de Prado al no brindar, en su momento, las evidencias del retraso de su proyecto de doctorado o de su estado de salud. Sin embargo, la funcionaria dejó la puerta abierta para que se revise nuevamente el caso y se pueda llegar a una solución.

Esta es la segunda parte del testimonio de Prado, en Noticias Caracol: