La alerta noticiosa sobre la liberación de la monja colombiana Gloria Cecilia Narváez la dio este sábado, pasado el mediodía, la agencia AFP, que cita a la presidencia de Malí.

En un comunicado, la Presidencia de Malí saluda “el coraje y la valentía de la hermana”, precisando que esa liberación es “la coronación de 4 años y 8 meses de esfuerzos conjugados de varios servicios de inteligencia”.

De la suerte de la religiosa, oriunda de Nariño, se sabía muy poco después de ser raptada el 7 de febrero de 2017. Pero, en julio pasado, un hermano suyo aseguró que le había llegado una prueba de supervivencia de ella.

Lee También

Desde Colombia, el hermano de la monja, Édgar Narváez, confirmó a la AFP que fue informado de la liberación de Gloria.

Estoy muy emocionado porque liberaron a la hermana, acaban de confirmarme la noticia, la liberaron por fin (…). Gracias a Dios está bien de salud, me enviaron unas fotos y se ve bien”, dijo Édgar Narváez a la AFP en una entrevista telefónica.

“Está con un monseñor en Malí, no sé muy bien cuál monseñor porque apenas me dieron la noticia”, agregó.

Arzobispo confirma liberación de monja colombiana

La liberación de la monja también fue confirada a la AFP por el arzobispo de Bamako, monseñor Jean Zerbo, quien aseguró que Cecilia Narváez “se encuentra bien”.

“Hemos rezado mucho para lograr su liberación. Doy las gracias a las autoridades malienses y a las otras buenas voluntades que hicieron posible esta liberación“, dijo Zerbo.

Gloria Narváez es miembro de las Hermanas Franciscanas de María Inmaculada, una congregación de origen suizo nacida en 1893 en Colombia y con presencia en 17 países.

(Le interesa: “Haitianos que lleguen a EE. UU. [desde Colombia] probablemente tengan sida”: Donald Trump)

Ella desarrollaba su trabajo misionero junto a otras tres hermanas: sor Sofía, de Tumaco (Nariño), sor Clara, de Medellín, y sor Adelaide, de Burkina-Faso. Antes de Malí estuvo en Benín.

El secuestro de la religiosa se produjo cerca de la localidad de Koutiala, 400 kilómetros al este de la capital, Bamako. Entonces trabajaba como misionera desde hacía seis años en la parroquia de Karangasso.

A lo largo de su cautiverio se han dado a conocer unas pocas pruebas de que está viva.

Esfuerzos frustrados de la Policía colombiana

De acuerdo al general Fernando Murillo, director de antisecuestro y extorsión de la Policía de Colombia, las últimas noticias de la hermana Narváez datan de comienzos de 2021.

Dos personas europeas que se fugaron de un sitio donde estaban secuestrados” con Narváez “decían que ella se encuentra bien”, contó a medios.

(También puede leer: Uno de los países más pobres del mundo sufre golpe de Estado en plena crisis por la pandemia)

La Policía colombiana organizó una “comisión urgente” para viajar al país africano en ese momento, “pero la pandemia no nos permitió viajar”, añadió.

Los secuestros son corrientes en Malí, sumido en una grave crisis de seguridad, sobre todo en el centro, uno de los focos de violencia yihadista.

Desde marzo de 2012, varias zonas del país y sus alrededores se encuentran en manos de grupos yihadistas vinculados a la red Al Qaida.

Los secuestros de malienses o extranjeros son uno de los aspectos de la violencia que golpea este país del Sahel de mayoría musulmana.