El colombo-venezolano Álex Saab, presunto testaferro del líder del régimen de Venezuela, Nicolás Maduro, cooperó, según documentos oficiales revelados por la justicia de Estados Unidos, con las autoridades de ese país.

Los archivos indican que Saab colaboró, durante un año y de forma “proactiva”, suministrando información sobre sus actividades ilícitas y los contratos con el gobierno del vecino país.

Las autoridades estadounidenses también confirmaron que la ficha clave de Nicolás Maduro se iba a entregar a la justicia norteamericana.

(Vea también: Álex Saab apelará a inmunidad diplomática para zafarse de caso de lavado de dinero)

Durante una audiencia en Miami, en la que compareció Saab, el juez Robert N. Scola programó para octubre próximo el juicio por conspiración para lavado de dinero que enfrenta el empresario y además ordenó la divulgación “inmediata” de dos documentos del expediente judicial.

Uno de los documentos, firmado por el fiscal Kurt K. Lunkenheimer, con fecha de febrero de 2021, habla de “la cooperación de Saab Morán con las fuerzas del orden antes de ser acusado en el Distrito Sur de Florida”.

“En particular, en el transcurso de casi doce (12) meses, Saab Morán cooperó con agentes de la Administración de Control de Drogas (DEA)”, detalla.

“Proporcionó a la DEA información sobre su actividad delictiva, participó en una cooperación proactiva como fuente confidencial para la DEA y entregó dinero a Estados Unidos y la DEA como parte de un acuerdo de autoentrega en Estados Unidos para enfrentar cargos por su conducta delictiva”, agrega.

En los documentos se menciona que en 2018 Saab admitió ante Estados Unidos que había pagado sobornos a funcionarios del gobierno venezolano en relación con los contratos que le otorgaron para proporcionar alimentos a ese país.”.

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Reuniones de Álex Saab con la DEA y el FBI en Bogotá

La Fiscalía señaló que “Estados Unidos tiene preocupaciones con respecto a la seguridad de Saab Morán y/o su familia si esta información fuera revelada al régimen de Maduro en Venezuela”.

Según el documento, Saab incluyó proporcionar “información sobre los sobornos que pagó y los delitos que cometió”.

Sin embargo, el juez Scola aseguró en un documento que durante cerca de un año la corte no ha recibido argumentación válida que respalde que la divulgación de los documentos ponía en peligro a la familia del acusado en Venezuela.

Los papeles además indican que el 8 y 10 de agosto de 2016, Saab, representado por un abogado de Estados Unidos y otro colombiano, se reunió con agentes de la DEA y el FBI en Bogotá.

Saab fue interrogado y proporcionó información sobre los contratos de sus empresas con el gobierno de Venezuela “para construir viviendas de interés social”.

“Incluida la forma en que se pagó a las empresas en relación con los contratos y cómo fluyó el dinero”, indica.

El 28 de noviembre de 2017, el empresario, junto con su abogado colombiano, se reunió con agentes especiales de la DEA y un fiscal federal adjunto “para otro informe”, agregan.

La Fiscalía llegó a advertir a Saab que, “si no se entregaba antes del 30 de mayo de 2019, no seguiría siendo una fuente colaboradora y sería acusado penalmente en el Distrito Sur de Florida”

Saab fue extraditado a EE.UU. en octubre desde Cabo Verde, donde fue detenido a raíz de una orden de captura internacional pedida por la Justicia estadounidense.

El empresario enfrenta un cargo de conspiración para cometer lavado de dinero en una corte de Miami, del que se declaró “no culpable” el pasado 15 de noviembre ante la jueza Alicia M. Otazo-Reyes.