La destacada actuación de Argentina en la Copa del Mundo Qatar 2022 ha generado locura colectiva entre los hinchas de la ‘albiceleste’, que ven muy cerca el sueño de por fin conquistar el tercer título en la historia, luego de las frustraciones de 1990 y 2014, en las que estuvo muy cerca de alcanzarlo.

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En el país del sur del continente no se habla de otra cosa que no sea lo que podría ser la clasificación a la gran final del certamen orbital, cuando enfrenten este martes (2:00 p.m. Hora Col.) a su similar de Croacia: la ‘bestia negra’ de la edición del 2018, cuando la goleó en fase de grupos (3-0).

Tan aceleradas están las pulsaciones luego de la agónica victoria en penales frente a Países Bajos, que le dio el ansiado tiquete al equipo de Lionel Scaloni para afrontar la crucial ronda que se viene, que hay quienes decidieron marcar este momento en su cuerpo, como símbolo de la gloria que está por llegar.

En especial, uno de los momentos más picantes de la competencia, en la que Lionel Messi no aguantó y descargó toda su furia contra uno de los rivales, el delantero Wout Weghorst, cuando este intentó acercarse. El famoso “¿Que mirás, bobo?” se volvió viral, a tal punto de estar en la piel de los fanáticos.

El conocido canal TyC Sports compartió en sus redes el video de un aficionado que se tatuó esta frase. Pero tal parece que varios ya le siguieron la idea, pues a medida que compartieron este tatuaje, fueron apareciendo otros hinchas que habrían seguido sus pasos. Y es que el fútbol da para todo.

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En el clip se ve al astro repitiendo una y otra vez este insulto, acompañado del “Anda pa’ allá”, mientras se devela el trabajo hecho en una de sus piernas. Aparece el rostro del jugador del PSG, con una corona en la cabeza y en un globo el texto que le dio la vuelta al planeta entero.

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Si esto sucedió en el pase a la semifinal, algunos no se quiere ni imaginar si Argentina logra el tiquete a la máxima instancia, o mejor aún, si se alza con el trofeo por tercera vez, tras su última gesta, en 1986. La ilusión está a la orden del día y hay quienes ya hicieron toda clase de promesas.

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