“Tengo más operaciones que el Álgebra de Baldor”. Con estas palabras el cantante abrió su entrevista con el programa ‘Lo sé todo’ (Canal Uno) en donde mencionó que se sometió a dos liposucciones y una cirugía bariátrica.

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La primera vez que el artista vallenato entró al quirófano tenía tan solo 21 años. “Me veía gordito y quería estar a la moda. Verme en forma”. Cuando el también actor finalizó su primera novela en la que protagonizó la vida del ‘Cacique’ Diomedes Díaz, terminó pesando 117 kilos. Esto lo llevó a ingresar por segunda vez a sala de cirugía.

La tercera fue la vencida. Luego de que ver que no paraba de subir kilos a causa de la retención de líquidos, entre otras cosas.

“Durante la dulce espera de mi primer hijo, los antojos me dieron a mí y no a mi esposa. Empecé a comer mucho”. Orlando finalmente se decidió por la cirugía bariátrica.

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Esta vez, la estética quedó a un lado. Ya que Liñán comenzó a ver complicaciones de salud. “Padecía hinchazón en las rodillas, dolor de columna y ya tenía hígado graso. Debía hacer pausa en medio de los conciertos por temas de fatiga”.

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Aunque el abogado de profesión reconoce que el ejercicio físico es la mejor opción para mantenerse vital y saludable, comenta que si se tiene la oportunidad de operarse, esta es una buena opción cuando de tiempo se trata. “Si no quiere hacer ejercicio, opérese”.

Actualmente su meta es bajar al menos 3 kilos para no dejarse coger ventaja del sobrepeso. “La vida es de propósitos. Hay que fijarse objetivos claros”.