Tener una mascota en un apartamento conlleva una serie de responsabilidades en materia de normas comunes y comportamientos obligatorios.
Lo que pocos saben es que tener una mascota y no vigilarla puede costar una enorme cantidad de dinero para los dueños.
(Vea también: Aviso para conductores que tengan multas de tránsito en Bogotá; carros, motos y más).
Esto, teniendo en cuenta que los ladridos del animal pueden ser catalogados como perturbaciones al ambiente colectivo y eso desencadenaría multas de sumas notables.
“Producir ruidos, molestias y actos que perturben la tranquilidad de los demás propietarios u ocupantes o afecten la salud pública“, reza la ley de propiedad horizontal, acerca de esos comportamientos.
A eso se suman los montos de las multas, señalados por el Código de Policía que rige en nuestro país.
Perturbar la tranquilidad de los otros residentes puede costarle 8 salarios mínimos diarios, es decir, 346.664 pesos.
Leyes de propiedad horizontal y por qué incluyen multas
En Colombia, las multas por irrespetar las leyes de propiedad horizontal se imponen para mantener la armonía, seguridad y convivencia entre los propietarios y residentes de un conjunto residencial.
La Ley 675 de 2001, que regula la propiedad horizontal en el país, establece un marco legal que busca organizar la vida comunitaria dentro de los edificios y conjuntos residenciales que comparten bienes y servicios comunes, como ascensores, zonas verdes, pasillos, entre otros.
Ruidos y demás elementos que se incluyen en esos reglamentos
Las multas sirven como medida disuasoria para evitar conductas que afecten negativamente a la comunidad, como el ruido excesivo, el uso indebido de zonas comunes, el incumplimiento de normas de seguridad o el no pago de cuotas de administración.
Estas infracciones pueden generar conflictos, deteriorar los espacios compartidos y aumentar los costos de mantenimiento para todos los residentes.
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