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Mediante la Resolución 271 del 16 de septiembre, el Gobierno decidió aplicar derechos compensatorios provisionales a las importaciones de leche en polvo procedentes de Estados Unidos, mientras continúa la investigación administrativa iniciada en julio.
La medida busca mitigar los efectos de los subsidios estadounidenses a la producción de leche líquida, principal insumo para la producción de leche en polvo.
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El gravamen ad valorem del 4,86 % se aplicará sobre el precio FOB (libre a bordo) de importación y estará vigente por un periodo de cuatro meses. Esta decisión se fundamenta en una investigación preliminar que ha encontrado evidencias sobre varios factores críticos.
Se ha identificado que el gobierno de Estados Unidos implementa al menos cinco programas de subsidios destinados a la producción de leche líquida. Durante 2023, estas subvenciones alcanzaron los US$1.209 millones, con un margen de subvención estimado en 4,86 %. Estos subsidios habrían permitido a las empresas estadounidenses reducir sus costos de producción y, por ende, competir a precios más bajos en mercados como el colombiano.
Las importaciones de leche en polvo desde Estados Unidos han aumentado de manera significativa, siendo ofrecidas en el mercado colombiano a precios considerablemente inferiores a los de la leche líquida producida localmente. Este incremento de importaciones ha generado una distorsión en los precios, afectando la competitividad de la producción nacional.
La presencia de leche en polvo subsidiada ha afectado negativamente a los productores colombianos de leche líquida. El sector industrial, que puede optar entre utilizar leche importada o leche nacional, ha mostrado una clara preferencia por el producto importado debido a sus bajos precios. Como consecuencia, la producción nacional de leche en polvo no ha alcanzado su capacidad total, lo que ha limitado la compra de leche líquida a los productores locales y ha afectado a la industria pulverizadora.
En 2023, el 62,22 % de la leche en polvo importada por Colombia provino de Estados Unidos, y se estima que los subsidios estadounidenses han causado un daño considerable a la producción local. Este es solo uno de los factores que han contribuido a la crisis actual del sector lácteo colombiano.
La investigación es llevada a cabo por la Dirección de Comercio Exterior del Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, y ha contado con la participación de representantes del gobierno estadounidense, empresas exportadoras e importadoras, así como productores colombianos y la industria láctea local. El proceso se ajusta a las normativas nacionales y a los acuerdos internacionales, incluyendo el Acuerdo de Promoción Comercial entre Colombia y Estados Unidos, y se ha realizado en conformidad con las disposiciones de la Organización Mundial del Comercio (OMC).
El ministro de Comercio, Industria y Turismo, Luis Carlos Reyes Hernández, explicó que la investigación sigue en curso y que, de confirmarse el mérito, las medidas definitivas serán “proporcionales, balanceadas y en concordancia con los hallazgos”. Asimismo, destacó que el gobierno busca proteger a los productores nacionales sin perder de vista los compromisos internacionales.
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Cabe recordar que esta investigación se inició el 3 de julio de 2024, mediante la Resolución 192, tras un análisis del comportamiento de las importaciones en años anteriores. En 2023, se registró un aumento del 13,12 % en las compras de leche en polvo subsidiada desde Estados Unidos en comparación con 2022, lo que ha afectado significativamente la producción local, especialmente en zonas rurales donde la leche es un producto esencial para la economía campesina y el sustento de miles de hogares colombianos.
Este proceso es solo un paso dentro de una serie de acciones que el gobierno está implementando para mitigar los impactos negativos en la producción nacional y proteger el bienestar de los sectores más vulnerables del país.
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