Esta semana inició la discusión de la reforma tributaria en el Congreso de la República. El proyecto, que busca recaudar 25,8 billones de pesos al año, lleva mensaje de urgencia, por lo que su trámite será más ágil de lo normal.

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¿Por qué se está hablando de de la reforma tributaria de Gustavo Petro? Conoce acá el contexto de esta noticia
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Aunque Gustavo Petro tiene las mayorías en el legislativo, pues lo respaldan los partidos alternativos y llegó a acuerdos con tradicionales como el Partido Conservador, la aprobación de la iniciativa será la prueba de fuego para saber qué tanto poder tiene en el Congreso.

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Hasta hoy, solo el Centro Democrático —único partido de oposición— había expresado su desacuerdo con el proyecto. Sin embargo, luego de una reunión con el ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, Cambio Radical también anunció que votará en sentido negativo.

Cambio Radical no apoyará la reforma tributaria

La colectividad anunció este miércoles que votará en contra de la reforma fiscal que propone el Gobierno de Petro. Según explicó en un comunicado de prensa, encontró 18 puntos que considera razones suficientes para no respaldar la iniciativa.

En primer lugar, Cambio Radical expuso que la reforma incrementa en 10 % o más los precios de muchos de los productos básicos de la canasta familiar que consumen las personas de más bajos ingresos, tales como las gaseosas, cereales, chorizos, morcillas, ponqués, etc.

Además, el partido señaló que el proyecto grava con un impuesto del 20 % la mayoría de las importaciones que realiza el país (alimentos, abonos, prendas de vestir y maquinaria) afectando a los consumidores.

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El partido de Germán Vargas Lleras cuestionó que la reforma grava con un impuesto de hasta un 39 % las herencias de valor superior a 123 millones de pesos y con la misma tarifa la utilidad en la venta de una propiedad que exceda los 114 millones.

Finalmente, Cambio Radical indicó que la reforma no plantea un control del gasto público ni una lucha frontal contra la corrupción, tampoco expone en qué se van a gastar o invertir los 25 billones de pesos que pretende recaudar y no sugiere un plan de choque contra los 80 billones de evasión y contrabando.