El Espectador es el periódico más antiguo del país, fundado el 22 de marzo de 1887 y, bajo la dirección de Fidel Cano, es considerado uno de los periódicos más serios y profesionales por su independencia, credibilidad y objetividad.
Una operación policial permitió la recuperación en Bogotá de aproximadamente 28 toneladas de cobre que habían sido robadas durante la madrugada en el municipio de Soacha. Este resultado fue posible gracias a una llamada a la línea de emergencias 123, lo que puso en marcha un trabajo coordinado que culminó con la detención de un joven de 24 años, presunto responsable de sustraer la tractomula en la que se transportaba el metal, cuyo valor ascendía a cerca de 1.200 millones de pesos colombianos, según información revelada por la Policía Metropolitana de Bogotá (Mebog).
De acuerdo con las autoridades, la víctima notificó de inmediato el hurto, y resaltó que el camión contaba con un sistema de geolocalización, herramienta tecnológica que facilitó la operatividad. Tras el reporte, varios agentes desplegaron patrullas por diferentes zonas de la ciudad hasta lograr localizar el vehículo sobre la carrera 13, punto donde finalmente fue interceptado. El conductor, al verse acorralado, entregó el automotor y la carga sin ejercer resistencia, permitiendo que ambos bienes fueran recuperados y puestos a disposición de la Fiscalía General de la Nación, mientras se determina si el capturado actuaba solo o hacía parte de una red más amplia dedicada al hurto de metales, un delito que en los últimos años ha afectado gravemente los sectores industrial, de telecomunicaciones y transporte.
La Policía destacó que, en lo corrido de 2025, han sido capturadas más de 33.000 personas y recuperados más de mil vehículos en la capital del país. Sin embargo, admitió que el robo de carga continúa siendo un flagelo de alto impacto para transportadores y empresarios, a pesar de estos resultados. Este caso en particular resalta la importancia tanto de la denuncia ciudadana como de los sistemas de rastreo satelital para la protección de los bienes en tránsito y la rápida reacción de las autoridades.
En cuanto a la incidencia por zonas, datos de la Secretaría de Seguridad presentados hasta noviembre muestran una disminución del 22% en los casos de hurto de vehículos en Bogotá, pasando de 3.900 reportes en 2024 a 3.041 en 2025. La localidad de Kennedy concentra la quinta parte del total de denuncias, es decir, 588 robos, seguida por Engativá (354), Puente Aranda (336), Ciudad Bolívar (230) y Suba (206).
Por modalidades de hurto, el uso de llave maestra lidera con 102 casos, seguido de robos a mano armada (100) e incidentes mediante la modalidad conocida como “jaleo”, sin utilización de armas (82 casos), lo que revela la diversificación en las estrategias empleadas por los delincuentes.
¿Qué significa la modalidad de “jaleo” en el robo de vehículos?
Frente al aumento de denuncias por robo de automotores en Bogotá, surgen interrogantes sobre los métodos que emplean los delincuentes para apropiarse de los vehículos. La modalidad de “jaleo” es una de las técnicas señaladas por las autoridades, particularmente relevante en el contexto de las cifras reportadas por la Secretaría de Seguridad.
El término “jaleo” hace referencia a una manera de sustraer vehículos sin el uso de armas, en la que los asaltantes aprovechan descuidos o momentos puntuales para apoderarse del automóvil, generalmente cuando este se encuentra con las llaves puestas o durante paradas breves. Conocer este tipo de modalidades resulta esencial tanto para los propietarios como para las autoridades, pues permite impulsar estrategias preventivas y optimizar la capacidad de respuesta frente al delito.
* Este artículo fue curado con apoyo de inteligencia artificial.
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