Bogotá cuenta con un espacio de información muy completo donde la ciudadanía, residentes y extranjeros pueden consultar la información que les interesa sobre Bogotá, su historia, sus localidades, la gestión y principales noticias de la Administración Distrital.
La ciudad de Bogotá, a través de su programa “Bogotá, mi Ciudad, mi Casa”, afianza su apuesta por la innovación en la construcción de espacios urbanos más dignos y accesibles. Un ejemplo concreto es el balance presentado por el Departamento Administrativo de la Defensoría del Espacio Público (DADEP) tras los primeros tres meses y medio de operación del baño público inteligente ubicado en el corredor peatonal Murillo Toro, en pleno centro de la capital. Según datos oficiales del DADEP, la instalación fue concebida para ofrecer un servicio seguro, digno y autosostenible, y se consolida rápidamente como referente positivo en el entorno de la carrera Séptima con calle 12A.
Desde el inicio de su funcionamiento, el baño inteligente ha brindado atención a 6.506 usuarios, dejando en evidencia no solo la necesidad de este tipo de servicios en el espacio público, sino también su marcado impacto social. El análisis de las cifras, proporcionadas directamente por el DADEP, resalta un crecimiento sostenido de usuarios entre los meses de agosto, septiembre y octubre, con registros mensuales que oscilan entre 1.600 y 2.100 personas. Lo relevante en este caso es la amplia diversidad de usuarios beneficiados, incluyendo mujeres, hombres, niños, adultos mayores y personas con discapacidad, lo que refuerza la dimensión incluyente de la iniciativa.
Durante este periodo evaluado, el uso del baño se distribuyó entre 2.268 mujeres, 2.933 hombres, 553 niños, 163 adultos mayores y 589 usuarios identificados como personas con discapacidad. Estas cifras reafirman el compromiso de brindar espacios accesibles y fomentar la equidad en el espacio público, aspecto que la administración distrital considera esencial.
Más allá de las estadísticas, uno de los logros más destacados es la reducción notable de prácticas inadecuadas en el entorno, como la utilización improvisada de áreas públicas por transeúntes o trabajadores para atender necesidades fisiológicas, hecho recurrente en muchas zonas urbanas densas. La presencia constante de defensores del DADEP que vigilan y orientan el uso del baño, ha permitido disminuir los problemas de salubridad, malos olores y desgaste del entorno, contribuyendo así a una mejor convivencia y a una experiencia más cómoda para quienes transitan y trabajan en este sector emblemático de la ciudad.
Este módulo inteligente se suma a otras instalaciones de baños públicos que han sido entregadas a lo largo del año, como ocurre bajo los puentes de las calles 45 y 53 con la avenida NQS, donde se ofrece el servicio sin costo para los usuarios. Todas estas acciones forman parte de una estrategia del DADEP que busca mejorar la calidad de vida de los ciudadanos mediante proyectos de alto impacto social y de bienestar colectivo.
El DADEP ha reiterado su compromiso firme con la futura instalación y mantenimiento de baños públicos en diferentes puntos de la ciudad, convencido de que garantizar servicios sanitarios seguros y de calidad es clave para la consolidación de un espacio público más incluyente y humano. Para la entidad, el balance mostrado evidencia que la implementación de infraestructura inteligente no solo cubre una necesidad inmediata, sino que constituye una valiosa herramienta para mejorar el uso y disfrute de los ambientes colectivos, como ocurre en la concurrida carrera séptima y sus alrededores.
¿Cómo funciona un baño público inteligente y qué lo diferencia de otros servicios sanitarios tradicionales?
La pregunta sobre el funcionamiento de un baño público inteligente surge ante la innovación que este tipo de infraestructura representa frente a servicios tradicionales. Un baño público inteligente, como el inaugurado en el corredor Murillo Toro en Bogotá, suele incorporar sistemas automáticos de limpieza, accesibilidad para personas con discapacidad, y vigilancia permanente que asegura tanto higiene como seguridad para sus usuarios.
Esta diferenciación resulta significativa, ya que, según la experiencia documentada por el DADEP en la ciudad, la tecnología e innovación en los baños inteligentes facilitan no solo el mantenimiento del servicio, sino también reducen el desgaste del entorno, elevan los estándares de salubridad y promueven la inclusión social. Así, la implementación de estos módulos inteligentes responde a una necesidad identificada y transforma la experiencia de uso del espacio público en Bogotá.
* Este artículo fue curado con apoyo de inteligencia artificial.
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