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Las lluvias de estrellas son uno de los espectáculos más impresionantes que el cielo nocturno nos ofrece. Estos eventos celestes, que cautivan a observadores de todas las edades, ocurren cuando la Tierra atraviesa la órbita de un cometa.
A medida que el cometa se acerca al Sol, el hielo y el polvo que lo componen se vaporizan, dejando un rastro de partículas a lo largo de su trayectoria.
(Ver también: Estas características son fundamentales para habitar otro planeta; todo un desafío)
¿Por qué se convierten en estrellas fugaces?
Cuando el planeta cruza este rastro de partículas, estas entran en la atmósfera terrestre a gran velocidad. La fricción con el aire las calienta hasta tal punto que se incandescen, produciendo los brillantes destellos que se conoce como meteoros. El punto del cielo desde el que parecen surgir estos meteoros se denomina radiante.
¿Todas las lluvias de estrellas son iguales?
No, cada lluvia de estrellas tiene sus propias características. Dependiendo del cometa que origina el fenómeno, las lluvias pueden variar en intensidad, duración y frecuencia. Algunas de las lluvias de estrellas más conocidas son las Perseidas, las Gemínidas y las Oriónidas.
(Ver también: Conozca por qué el sol no ilumina el espacio exterior si está en él; esto dice la ciencia)
¿Cómo observar una lluvia de estrellas?
Para disfrutar de una lluvia de estrellas, lo ideal es buscar un lugar oscuro, lejos de la contaminación lumínica de las ciudades. Es recomendable llevar una manta o silla reclinable y abrigarse bien, ya que las observaciones suelen realizarse durante la noche. No necesita ningún instrumento especial, solo sus ojos.
*Este artículo fue escrito y curado por periodistas del equipo de Robby Bienestar, con apoyo de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto.
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