En diferentes partes del mundo se presentan casos en los que pasajeros a bordo de un avión interrumpen la tranquilidad de los demás viajeros.

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Esta situación se presentó en los últimos días en el aeropuerto Louis Armstrong de Nueva Orleans (Estados Unidos) dentro de una aeronave de la compañía Southwest Airlines, luego de que una ruidosa mujer identificada como Kamaryn Gibson protagonizara un ‘show’.

De acuerdo con testigos, todo empezó por una solicitud que le hizo una de las azafatas, a quien no le respondió de la mejor manera, explicó el medio Fox News.

“La azafata le estaba pidiendo que se abrochara el cinturón de seguridad, levantara el asiento y levantara los pies de la pared. Ella se negó, le insistieron numerosas veces y aún así se negó”, le dijo Johnathan Fancher (uno de los viajeros que iba en el avión) al medio mencionado.

Acá, el video de lo ocurrido:

@kicknit35 When you get removed from your #flight and arrested for being to #drunk #southwest #southwestairlines #cops #nola #memorialday #cameron @Southwest Airlines your #flightattendants ♬ original sound – Johnathan Fancher

La situación se salió de control y miembros de la tripulación advirtieron que en caso de que la mujer no se calmara debían suspender el despegue. Efectivamente esto se dio, ya que comenzó a poner los pies en el asiento que estaba frente a ella y patear al pasajero que estaba allí.

Los pilotos regresaron el avión al sitio de embarque y la Policía tuvo que intervenir. La mujer (que según confirmó la Policía estaba alcoholizada) fue detenida, aunque en las imágenes que circularon en redes sociales se evidenció la ardua labor que tuvieron que hacer los uniformados para lograrlo. De hecho, en un instante se apreció cuando la ciudadana mordió a uno de ellos.

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“Ella comenzó a pelear con ellos y continuó peleando con ellos en el puente de mando y en el área de asientos públicos”, agregó otro testigo al canal.

La mujer fue acusada de tres cargos: agresión a un oficial de Policía, alteración del orden público en estado de ebriedad y resistencia a un oficial y conducta delictiva, mencionó el medio. Sin embargo, quedó en libertad después de pagar una fianza de 9,750 dólares, es decir un poco más de 41 millones de pesos.