La joven, que trabaja como paramédica en Londres (Inglaterra), sufrió el derrame cerebral mientras disfrutaba de una noche de películas con un amiga. Ella se durmió tras estirar el cuello y se despertó a los 15 minutos. Cuando intentó levantarse para ir al baño, se sintió mareada y cayó al piso porque no pudo mover la pierna izquierda, informó Daily Record.
Su amiga la ayudó a ponerse de pie y pensó que Natalie solo estaba borracha, ya que antes de ir a casa ellas habían tomado unos tragos en un bar. La joven creyó lo mismo y por eso no llamó a emergencias de inmediato; sin embargo, luego pensó que tal vez la habían drogado en ese establecimiento, indicó el mismo periódico.
Conforme pasó el tiempo, la joven se dio cuenta de que se trataba de algo grave, así que llamó a una ambulancia. En el hospital, ella quedó “en shock” al enterarse de que había sido un derrame, pues ella goza de una buena salud, no toma, no fuma y tampoco tiene antecedentes familiares de accidentes cerebrovasculares, señaló Daily Mail.
Los doctores le hicieron una cirugía de emergencia para reparar su arteria reventada y limpiar el coágulo que se formó en su cerebro. A pesar de esa operación, Natalie quedó sin poder mover varias partes de su cuerpo, así que ahora realiza terapias para volver a trabajar y ser la joven saludable que siempre ha sido. Ese proceso tardará entre 6 y 12 meses, concluyó el rotativo británico.
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