La consiliatura de la universidad determinó que el título de Julián Bedoya fue “expedido irregularmente” luego de la comisión de asuntos disciplinarios estudiara más de 3.000 archivos, indicó el portal Vorágine.

La historia se remonta a diciembre de 2019 cuando la Procuraduría le abrió una investigación a Bedoya por “obtener beneficios adicionales a los inherentes al desempeño de su cargo”, pues, al parecer “utilizó su condición de congresista para lograr ventajas” en la Universidad de Medellín. 

El senador del partido Liberal ingresó a la universidad en 2001, pero cuando empezó a empaparse con la política, en el Concejo de Medellín, descuidó sus estudios, por lo que terminó graduándose en marzo de 2019.

Pero llamó la atención las irregularidades que se conocieron desde su reingreso, indicó el portal; la primera fue que Bedoya volvió a la universidad (en 2018) con un promedio de 2.79; posteriormente, en lugar de ir a clases, presentó 16 exámenesnes en 4 días. Incluso, se registra que en un solo día hizo 7, y todos los aprobó.

Pero además todo habría sido con cómplicidad del entonces rector de la Universidad de Medellín, Néstor Hincapié, que terminó renunciando al cargo, y de varios docentes.

Universidad de Medellín retira título de abogado a senador Julián Bedoya

A la conclusión que llegó el consejo de la institución, según Vorágine, es que se saltaron varias normas para que el senador del partido Liberal obtuviera su título.

El primero es que como Bedoya duró tanto tiempo sin estar en la universidad (desde 2009), su caso debía pasar por el consejo de la facultad de Derecho, para que decidiera el plan de estudios que era pertinente para el congresista; eso no pasó.

“Al no cumplir con los requisitos del plan de formación deberá anularse el título de abogado otorgado al señor Julián Bedoya Pulgarín y los registros al interrior de la institución que ello conlleve”, decidió la institución.

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Pero además, varios de los exámenes que el político presentó en tiempo récord fueron calificados por profesores que no eran títulares de las materias, por lo que los docentes se exponen a sanciones.

Bedoya no aceptó la decisión y apeló, por lo que el caso irá a una segunda instancia.